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Uno de los pocos sitios en el planeta donde un automóvil puede llegar a su máxima velocidad.
El Circuito de Nardò, también llamado el Anillo Nardò, se construyó en 1975 y es una pista diseñada exclusivamente para las pruebas de alta velocidad. Ubicada en la provincia de Lecce en Italia, la pista es tan grande que puede verse desde el espacio.
Originalmente construida por Fiat con el nombre Pista di prova di Nardò della Fiat, Porsche Engineering hizo la compra del circuito en 2012 y ahora la llaman el Nardò Technical Center. Aunque Porsche es su dueño principal, cualquier fabricante o inclusive entusiasta puede venir a probar qué tan duro le meten al acelerador.
El Circuito de Nardò tiene una longitud de 12.5 kilómetros y forma un círculo perfecto. Tiene cuatro carriles para vehículos y motocicletas en un ancho de 16 metros. Cada carril está separado para aislar a los conductores con específicos niveles máximos de velocidad.
El carril uno se reserva para 100 kilómetros por hora, el segundo para 140, el tercero para 190 y el cuarto para 240. Los límites de velocidad establecidos pueden excederse solamente si se desea romper un récord de velocidad y muchos fabricantes lo han intentado.
Gracias a su ubicación al sur de Italia, hay pocos días de lluvia, lo que significa que el circuito permanece abierto 363 días al año. El Circuito de Nardò además tiene una elevación al suelo de un 8%. Esto ayuda que la fuerza centrífuga se compense y permita a los conductores mantener una velocidad neutral mientras el coche avanza lo más recto posible.
El Circuito de Nardò ha tenido contendientes de todo tipo de marcas en los últimos años. Honda fue el primer fabricante en romper el récord de velocidad promedio durante 24 horas en 1979 a una velocidad de 127 kilómetros por hora en una motocicleta 125cc.
Volkswagen con el ARVW logró el récord para los vehículos diesel con una velocidad de 362 kilómetros por hora en 1980. Mientras tanto, en términos de motocicletas, la Elf France prototype estableció en 1986 seis récords de velocidad consiguiendo una velocidad tope de 312 kilómetros por hora. ¿Se imaginan cómo se habrá sentido el piloto?
Al día de hoy en cuanto a coches de producción, el Koenigsegg CCR permanece con el récord de la pista con una sorprendente velocidad de 388 kilómetros por hora; impuesto en febrero 28 de 2005.
Porsche Taycan también destaca en 2019 cuando cubrió la distancia de 3,425 kilómetros en 24 horas en una prueba de desgaste de automóviles eléctricos.
Se trata nada más y nada menos que Volkswagen y Mercedes-Benz. El récord absoluto data sorprendentemente de 1979 cuando Mercedes-Benz con su C111-1V alcanzaría una velocidad máxima para un vehículo: 403.978 kilómetros por hora.
Este coche surgió en 1969 con un cuerpo hecho de fibra de vidrio y un motor Wankel. El motor se actualizó para tener 4 rotores que producían 350 caballos de potencia en vehículo que apenas y tenía peso. Con unas modificaciones adicionales, el C111-1V completaría los 12.5 kilómetros en tan solo 1 minuto y 57 segundos.
Mientras tanto, Volkswagen sorprendió con su propio súper coche que creó en 1997. El Volkswagen W12, también conocido como el Volkswagen Nardò, fue pedido por parte del entonces CEO de Grupo Volkswagen Ferdinand Piech y el legendario diseñador Giorgetto Giugaro.
La idea era proporcionar un coche deportivo con instrucciones específicas de adaptar un motor de 12 cilindros en W con motor central y que adaptase el sistema de tracción a las 4 ruedas Syncro de VW.
El coche se probó en el circuito y durante 24 horas el coche cubrió una distancia de 7,740.576 kilómetros en una velocidad promedio de 322.891 kilómetros por hora.
Actualmente, el Circuito de Nardò se encuentra nuevamente abierto al público. Entonces si tienes un súper coche y las agallas para llevar un coche al máximo, ya sabes a dónde ir.
Continúa en nuestro canal de Youtube para nuestras pruebas en video.
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