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¿Te has dado cuenta que no existe ningún monoplaza con el #13?
La mayoría de los pilotos de Fórmula 1 hacen rituales antes de subirse a su monoplaza o incluso evitan hacer algún tipo de cosas, ya que aseguran que esto les traerá mala suerte a la hora de la carrera.
Auto de Moisés Solana Foto: F1aldia.com
¿Te has dado cuenta que no existe ningún monoplaza con el #13? El número 13 en muchas culturas representa la mala suerte y en el deporte motor también es un número que no tiene muy buena imagen.
La maldición del número 13 comenzó hace 85 años en 1925 el piloto Paul Torchy fallecía en el Gran Premio de San Sebastián disputado en el circuito de Lasarte. El piloto francés falleció al chocar con un árbol y portaba el numero 13.
Desde 1950 hasta nuestros días solo dos pilotos han disputado ese número, en 1963 el piloto mexicano Moises Solana lo utilizó durante el Gran Premio de México al volante un BRM P57 finalizando en undécima posición.
Pero la ultima aparición de este número fue en 1976 en el Gran Premio de Inglaterra por Divina Galicia, una de las pocas mujeres que han tomado el mando de un auto de la Fórmula 1, Divina no consiguió clasificarse al volante de un Surtees TS16.
El doble campeón del mundo siempre evitaba los gatos negros y se dice que si veía uno, este prefería dar el recorrido que fuera con tal de no cruzarse con el felino.
Otra de las supersticiones que tenia el italiano era que nunca corría sin su casco azul celeste ni su inseparable ropa (camisa de lana y pantalones con grandes bolsillos delanteros, también en color azul claro).
Tanto eran sus supersticiones que no dejaba que absolutamente nadie tocara sus pertenencias.
Después de clasificar en Brasil en 1989 los mecánicos pusieron el auto del italiano en la parte izquierda del garage, al momento de entrar parecía que hubiera visto un fantasma y señalaba que simplemente no entraría a su auto mientras este estuviera en la parte izquierda, por lo que al equipo no le quedo más que mover el coche de lugar.
Sergio Pérez es muy devoto y sabemos que dentro de su monoplaza lleva una foto del difunto Papa Juan Pablo II.
Checo asegura que tiene esta imagen ya que el año 2000 el pudo tocar la mano del pontífice y sintió una gran conexión con él, misma que sigue sintiendo hasta la fecha y siente que al tenerlo en su coche le da una fuerza extra.
Juan Manuel Fangio siempre corría acompañado con una imagen de la Virgen de Guadalupe.
Alan Jones siempre utilizaba unos calzoncillos color rojo, mientras que David Coulthard siempre corría con unos calzoncillos azules que le regaló su tía, pero en un grave accidente tuvieron que cortárselos para intervenirlo de urgencia.
Desde entonces siempre los lleva en la maleta acompañados por varios tréboles de cuatro hojas y alguna que otra imagen de santos.
Otro de los pilotos de Fórmula 1 que tiene rituales es Felipe Massa, quién si realiza un buen crono utiliza los mismos calzoncillos para la carrera del domingo.
Vettel pone una medalla de San Cristóbal bajo los cordones de sus botas.
Sebastian Vettel es un ávido portador de encantos de la buena suerte, el alemán siempre ha llenado los bolsillos de sus trajes de carrera con objetos tan variados.
Como lo es un puerquito de metal y una moneda de un centavo que se encontró en Indianapolis en la calle antes de su debut en la F1.
Lo que más destaca de sus amuletos es una medalla de San Cristóbal que le regalo su abuela, misma que pone bajo los cordones de sus botas.
Kimi Raikkonen lleva utilizando durante años los mismos calcetines para el día de la carrera, los cuales trata como si fueran de oro.
El piloto español tiene varias manías y una de ellas es ponerse la zapatilla derecha antes que la izquierda.
En cada viaje nunca falta una baraja de cartas en su maleta y antes de cada carrera realiza un ritual junto a su manager en donde cantan para poder descargar toda la adrenalina.
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