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Estoy casi seguro de que no existe nadie en este mundo que no le tenga por lo menos tantito cariño a los coches compactos. Hay algo en ellos, puede ser su confiabilidad, su comodidad,...
Estoy casi seguro de que no existe nadie en este mundo que no le tenga por lo menos tantito cariño a los coches compactos. Hay algo en ellos, puede ser su confiabilidad, su comodidad, su economía, su aspecto jovial; algo que nos atrae a todos. Dentro de ese mundo, resalta un coche compacto realmente icónico: el Chevrolet Chevy.
Acompáñenme este #ViernesVintage donde partimos de un modelo histórico por su belleza y velocidad, el Mercedes-Benz 300 SL, a otro modelo también histórico por su increíble popularidad en todo el mundo y su legendaria reputación de aguante.
Chevrolet Chevy no siempre se llamó así. Entre los muchísimos nombres que ha tenido en diferentes lugares del mundo; Vauxhall Nova en Reino Unido, Holden Barina en Australia, Buick Sail en China, Chevrolet Celta en Brasil, Suzuki Fun en Argentina, Chevrolet Corsa Classic en América Latina; todo comenzó bajo el nombre Opel Corsa.
Lanzado en 1982 bajo la insignia Corsa A, este vehículo fue diseñado primordialmente por la filial de General Motors en Europa conocida como Opel. Los mercados Francia, Italia y España fueron la audiencia principal, debido a que la participación en el mercado de los automóviles pequeños era de hasta el 43% de las ventas totales.
El lugar de arranque fue decidido. Zaragoza, España sería el lugar de donde saldría el padre de Chevrolet Chevy, el Opel Corsa.
Corsa A sería ofrecido como hatchback de 3 puertas, la configuración preferida para el mercado europeo y un sedán de dos puertas, la cual se posicionaría como la favorita para el sector Latinoamericano más adelante. Tres motorizaciones distintas serían ofertadas: motor de 1 litro de 45 HP, 1.2 litros de 55 HP y 1.3 litros de 70 HP.
Hasta que el modelo A de Corsa no comprobó su éxito en Europa que fue cuando el proyecto Corsa se expandió al resto del mundo. La versión B del Corsa llegaría en 1993 para adoptar el nombre por el que lo conocemos en México así como el apodo con el que se le conoce de cariño a la marca en Estados Unidos: Chevrolet Chevy.
Bajo la insignia de Chevrolet, marca ya conocida en México en lugar de la más obscura Opel, el modelo lo primero en recibir sería un rediseño por parte de Hideo Kodama, el diseñador japonés también responsable del Opel Agila. Esa estética amigable y juguetona en forma de huevo sería legendaria incluso al día de hoy.
Acompañada de eso, el Chevy contaba con tracción delantera para todos sus modelos y motores de 1 y 1.3 litros. La importación era directa desde España, por lo tanto sus denominaciones para su carrocería serían Joy para el modelo de 3 puertas y Swing para el modelo de 5.
Con una longitud de apenas 3.73 metros, naturalmente, el tamaño tan pequeño sería factor clave de su éxito además de su precio tan accesible y la economía de su motor.
Dos años de éxito contundente del vehículo tan confiable como muro de ladrillos, llevó a Chevrolet de México a producirlo en la planta de Ramos Arizpe en Coahuila. Con este gran paso, comenzaría también ligeras modificaciones adicionales.
La primera de ellas, aunque las asignaciones de Joy y Swing se mantuvieron para distinguir ambas carrocerías, Chevrolet optó por cambiar el motor de la oferta original a uno más poderoso de 78 HP también de 1.6 litros.
Consumado en el mercado mexicano para 1997, Chevrolet Chevy de ahí expandió su gama aún más para solucionar la demanda del cliente mexicano.
Por ejemplo, ante la demanda de versiones aún más económicas, Chevrolet creó la versión Pop de Chevy, una variación menos equipada que llegó a ser el rival principal para el amado Vochito.
Su motor más moderno con una caja manual de 5 velocidades, algo muy inusual para ese momento y no sólo para vehículos de su segmento; la versión Pop se convirtió en el best seller de Chevrolet en México. Incluso para 2002 tendría una variante adicional enfocada exclusivamente para el mercado de los taxistas derivada de Chevy Pop.
Sin embargo, no sólo habrían cambios en el motor. También vendrían rediseños especiales. De Chevrolet Chevy saldría Chevrolet Monza que aunque provenía desde Brasil, contaba con partes mexicanas. Monza representaba la versión sedán del Chevy y se estrenaría con un motor de 1.6 litros y 95 HP así como una exclusiva oferta de una caja automática de velocidades.
El éxito de Chevy para sus múltiples audiencias llevó a la marca a dar un paso más allá. En 1999, la gama se ampliaría una vez más y directamente importada desde Argentina se vendería el modelo de Chevy en una versión pick up llamada Chevy Wagon.
Sorprendiendo a todos, Chevrolet Chevy aguantaría su presencia en el mercado hasta 2004, 4 años después de su desaparición en los mercados europeos en donde había sido concebido.
Fue entonces que el Chevy basado en la generación B de Corsa fue rediseñado por la filial mexicana de General Motors con la asignación C2.
Situado debajo del Chevrolet Corsa, vehículo vendido en México y con el que estaba basado la generación C de Corsa; Chevy C2 contaba con carrocerías de 3, 4 y 5 puertas. Además de tener un tamaño ligeramente más grande que su predecesor aunque con su mismo motor de 1.6 litros, más tarde se le añadiría un sistema de inyección.
Estas notables mejoras hicieron que esta nueva cara de Chevy durara en el mercado mexicano hasta 2008 cuando nuevamente fue rediseñado para crear el Chevy C3.
Esta sería la última generación de Chevy y se vendería hasta 2012 para ser eventualmente reemplazada por Chevrolet Sonic. Chevrolet despidió a su brillante soldado después de casi 18 años en nuestro mercado con el modelo Edición Especial Chevy Joy 2012 ofertado en su momento a 144,000 pesos.
Chevrolet Chevy, bajo sus decenas de nombres y apodos, fue un vehículo con un tremendo impacto mundial. Fabricado desde las plantas históricas en Europa hasta lugares recónditos como Egipto y Tailandia, fue hasta llegar a México donde Chevy hizo historia al convertirse en el país donde se fabricó el último modelo de Corsa B en el mundo. Un récord mundial más para México con uno de los emblemas automotrices de nuestro país.
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