BYD lo hace de nuevo: YANGWANG U9 Xtreme alcanza los 496.22 km/h y es el auto más veloz

Hace algunas semanas el vehículo deportivo de la marca perteneciente a BYD obtuvo el récord de velocidad para un vehículo eléctrico. Pero ahora, se ha llegado a un extremo. Esto porque el YANGWANG U9 Xtreme ha obtenido el récord como el auto más veloz al alcanzar los 496.22 km/h.

En la pista de pruebas ATP de Papenburg, Alemania, el mundo presenció algo más que una hazaña técnica: fue un momento de revelación. El YANGWANG U9 Xtreme, superdeportivo eléctrico de la marca de lujo de BYD, alcanzó los 496.22 km/h, convirtiéndose en el vehículo de producción más rápido del planeta.

El anterior récord pertenecía al Bugatti Chiron Super Sport 300 con una velocidad de 490.5 km/h en una prueba realizada en 2019.

Configuración destinada a la velocidad en YANGWANG U9 Xtreme

Par alcanzar este hito, el eléctrico deportivo tiene una configuración de cuatro motores eléctricos capaces de girar a 30,000 rpm. En conjunto desarrollan 2,976 caballos de potencia. A su vez, posee una arquitectura de 1,200 voltios y una batería Blade con celdas LFP que descarga a una tasa de 30C—diez veces más que un eléctrico convencional-. Cada componente fue diseñado para competir.

Al volante, el piloto alemán Marc Basseng no solo manejó un coche: domó una visión. Su destreza y valentía fueron el puente entre la ingeniería y la épica. Porque este récord no es solo de BYD, ni de China, ni de la electrificación. Es de todos los que alguna vez soñaron con que la velocidad también podía ser limpia, silenciosa y sostenible.

El U9 Xtreme no ruge como los V12 del pasado. Su sonido es distinto: es el zumbido del progreso, el susurro de la innovación, sin embargo, su presencia es arrolladora. Dos metros de ancho, casi cinco de largo, una silueta que parece esculpida por el viento. Su suspensión adaptativa DiSus-X no solo lo mantiene firme: lo convierte en una extensión del asfalto.

Este récord es también una declaración. Que el lujo no está peleado con la conciencia. Que la velocidad puede ser eléctrica sin perder alma. Que el futuro no es una renuncia, sino una evolución.

Con solo 30 unidades producidas y un precio que ronda los 243 mil dólares; el U9 Xtreme es exclusivo, sí. Pero su impacto va más allá de sus cifras. Es un símbolo. Un faro. Un recordatorio de que los sueños, cuando se persiguen con obsesión, pueden alcanzar los 496.22 km/h.

Hoy, el mundo no solo celebra un récord. Celebra una nueva era. Una en la que la velocidad es eléctrica, en la que la ingeniería se funde con la emoción, y en la que el futuro ya no es una promesa: es una pista, un auto, un instante. Y se llama YANGWANG U9 Xtreme.