Los números para el francés han sido excepcionales a bordo de su Volkswagen Polo WRC
La máxima competición de rallies, sí esa que pone en jaque a la Fórmula 1 a través de la corriente que piensa que la WRC exige y demanda mucho más pericia a los pilotos que la Categoría Reina del automovilismo «monoplaza», ha cerrado la primera posición a tres fechas de que «todo termine». Así es el dominio, amplio, ejercido por el piloto francés Sébastien Ogier, quien se convertirá en el Campeón de la más reciente temporada.
Los números para el francés han sido excepcionales a bordo de su Volkswagen Polo WRC, pues ha conseguido 6 victorias, 2 segundas posiciones y 9 power stages hasta el momento. Al día de hoy, en los albores del Rally Francés, Sébastien terminó tercero en la etapa de potencia, lo que garantiza su campeonato a tres rallies de que termine el World Rally Championship, eso es Avant-Garde. TAG Heuer, quien ha apostado por fabricar una línea de productos que ayuden a los pilotos profesionales a conseguir el mayor de los éxitos, ha sido el patrocinador en gafas y relojes de Sébastien Ogier, quien además porta con espíritu racing un Carrera Calibre 1887, al tiempo que cubre sus ojos con los Eyewear LRS.
Durante estos primeros años de asociación, Sébastien Ogier estuvo involucrado en el desarrollo de estas nuevas gafas, demostrado su capacidad de colaboración con la marca para hacer que este producto sea una ayuda fantástica en condiciones climáticas difíciles inherentes a la WRC (gafas naranjas de los “días blancos” o gafas de visión nocturna para las etapas nocturnas). En el 2013, su relación con TAG Heuer fue más allá de su increíble temporada en WRC: además de su implicación en el desarrollo de producto, Sébastien corrió la Porsche Supercup en Mónaco durante el Gran Premio de F1, en un coche que exhibía la marca TAG Heuer en el capó, celebrando el 50 aniversario del cronógrafo para pilotos: CARRERA.