Ingrassia, copiloto de Sébastien Ogier, se unió a las 650.000 personas que abarrotaron la plaza frente al palacio presidencial argentina
Ingrassia, copiloto de Sébastien Ogier, se unió a las 650.000 personas que abarrotaron la plaza frente al palacio presidencial, la Casa Rosada, en Buenos Aires, para la salida del raid de 14 etapas y 9.100 kilómetros de duración.
El francés dio a entender que el Dakar podría estar en sus objetivos de futuro tanto para él como para su compatriota y piloto de Volkswagen Motorsport, Ogier.
“Creo que es algo que le gustaría”, comentó Ingrassia.“Ya hemos hablado de ello durante los enlaces de los rallyes. Por el momento estamos centrados en el WRC, pero quién sabe”.
Ingrassia se perdió los test previos a la Navidad que realizó Ogier mientras se recuperaba de una operación, pero volverá a sentarse a la derecha de su Polo R WRC en los test previos al Rallye Monte Carlo que llevará a cabo Volkswagen la próxima semana.