En nuestra sociedad la mentalidad de cuando alguien nos anuncia un hecho importante es porque ya está cercano a suceder, sin embargo, en el caso del anuncio de Lexus se están dando más de 24 meses para iniciar la venta… (¿mucho, poco, cuestión de enfoques?), en realidad el cliente mexicano está acostumbrado a que le anuncien la llegada del producto e ir a comprar. Por lo menos así ha pasado con casi todas las marcas cuando han anunciado su llegada, con distribuidoras designadas, algunas veces hasta construidas y con vehículos en el país. En este caso no es así, marcando la diferencia de Lexus quizás. Quedará en el recuerdo una conferencia de prensa de gran convocatoria, inclusive con algunas cámaras de televisión –inusual para anuncios corporativos de la industria– a una hora inusual pues no ni el desayuno ni la comida, sino a media mañana con un escenario tipo “lounge” y sin coches, altos ejecutivos y de gran experiencia de la compañía en Estados Unidos, en video y discursos anunciaron la llegada de una de las marcas que poco se podía explicar su ausencia en nuestro país hasta la semana pasada. La diferencia Lexus quedó marcada.
Fueron necesarios 16 años luego del inició de ventas de Toyota en nuestro país, en ese tiempo se han recorrido varios caminos, hoy con una organización reportando a la empresa en Estados Unidos, se anuncia no solo la llegada de una nueva marca, sino en el fondo se está haciendo realidad la gran calificación que la organización da a México en varios temas, el principal: el trato al cliente. En 2021 llegará Lexus con autos y camionetas a gasolina e híbridos queriendo ser la compañía de lujo más verde del mercado con sus modelos 2022, que bien pudieron haber anunciado en 12 meses más, pero esto recalca factores importantes: Toyota de México ha llegado a la madurez y calificaciones en servicio al cliente como para considerar que hay una estructura que pueda darle la “experiencia Lexus” al cliente mexicano; segundo factor: seguramente ya estudiaron los precios contra sus competidores y la fórmula les arroja que pueden vender al volumen que buscan donde quiera que estén hechos los vehículos; tercero, el mercado según las gráficas expuestas da confianza en estos años por venir y al parecer favorecerá esa gama alta, aunque el mercado total se estima siga cayendo.
Cinco distribuidoras no es un riesgo muy alto, con inversionistas fuertes la marca estará bien cuidada y resguardada de variaciones importantes de mercado, lo más valioso será que quien traiga un Lexus, hable como nunca había hablado de otra compañía de cualquier bien o servicio en su vida, así tuvo éxito en el mercado americano. Si logran sorprender al mercado que ya tiene poco factor de sorpresa, entonces Lexus será el mismo éxito que en otros países. Bienvenidos.
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