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Hoy habrán pasado ya 4 días de la caída de la bandera a cuadros de la Fórmula 1 en el Autódromo Hermanos Rodríguez, pero ahí no quedó todo, es tan solo un momento que...
Hoy habrán pasado ya 4 días de la caída de la bandera a cuadros de la Fórmula 1 en el Autódromo Hermanos Rodríguez, pero ahí no quedó todo, es tan solo un momento que coronó el esfuerzo de muchas voluntades.
Realmente, cuando Hamilton llegó a la meta del Gran Premio de México, ganó el país, como una nación unida, con visión por abrirse al mundo. La Fórmula 1 es el deporte más global del mundo, se corre en países que, por ejemplo, no juegan soccer, o en naciones donde nunca se jugará el americano, el deporte motor lleva esa universalidad, aunque son “pocas” fechas en el año, difunden por el globo terráqueo llevando el mensaje de cada país donde se corre.
Mire usted, casi 395,000 espectadores en tres días en el Gran Premio de México, siete aviones Boeing 747, toneladas de equipo para cada escudería, la transmisión a todo el mundo con más de 150 cámaras que controlar –cada coche puede llevar hasta cinco de ellas. Un estudio audiovisual de los mejores en el planeta conectado constantemente a Londres para las imágenes que vemos por todos lados, construido en cada pista y con una inversión inimaginable de más de 250 personas dedicadas con 70 más en Inglaterra, personal de pista en el orden de casi miles de personas, un centro de prensa a la altura de unas olimpiadas pero en cada fecha que se corre, etcétera.
A México lo hace único unir este deporte con la fiesta de Día de Muertos y la voluntad empresarial que lleva ideas que en otros países poco se pueden creer como: el Foro Sol y su espectáculo de premiación, el “Piloto Mariachi” llamado Mario Achi, el auto subiendo en el pódium, los aviones caza o la bandera monumental desde un helicóptero, el gran mural del centro de prensa, etcétera. El país tiene ganas de hacerlo, de coordinarlo impecablemente, de llenar sus hoteles, restaurantes y centros de eventos durante toda la semana, de llevar su imagen al mundo a través de la Formula 1.
La F1 es mucho más que unos coches corriendo, es la ventana al mundo de México. Felicidades Gran Premio de México en su organización, hacen quedar cada vez mejor a todos los mexicanos.
