Cuando escuché la frase: “La diferencia entre las pistas y los autos de calle se acorta en cuanto la tecnología eléctrica inicia a permear ambos ámbitos de la emoción por manejar”, me encantó porque...
Cuando escuché la frase: “La diferencia entre las pistas y los autos de calle se acorta en cuanto la tecnología eléctrica inicia a permear ambos ámbitos de la emoción por manejar”, me encantó porque es una gran verdad.
El mundo motor ha cambiado, mientras los eléctricos ya no son solamente ecológicos, sino emocionantes de manejar, así como una solución para la contaminación ambiental en ciudades, lucen grandes diseños y ofrecen un arranque más rápido que los de gasolina. Por el otro lado, la combustión interna sigue siendo emocionante: escuchar sus ronquidos, su olor característico, cada día más limpios y más complementados con dispositivos eléctricos. El desarrollo de las pilas en las pistas y su ayuda en la movilidad de los bólidos de distintas fórmulas, llega a los que compramos para la calle haciéndolos más emocionantes y eficientes.
No estará lejos usted de comprar un vehículo que tenga una ayuda eléctrica, algunos otros autos que son 100% eléctricos, tal como los pilotos de F1 manejan dispositivos de energía eléctrica que usados inteligentemente les pueden dar una ventaja competitiva, o a usted en su auto le pueden evitar gastar gasolina cuando llega a paro total en altos y demás ocasiones donde no necesita el motor encendido, tal y como la ayuda eléctrica le puede hacer un manejo inicial de su auto mucho más emocionante.
Digamos, que estamos en el mejor de los dos mundos actualmente, la frontera está a punto de permear los eléctricos en las calles y usted cargando gasolina en el día y electricidad en la noche para autos de más de 1,500 kilómetros de rango y poco a poco adaptándonos a lo que más nos convenga y menos nos cueste.
Sin duda una época emocionante de vivir, ¿qué opina usted?
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