Se conserva la parte de la placa con la escala de segundos y los totalizadores cuadrados de 30 minutos a las 3 horas y de 10 horas a las 9.
Que no se pierda la bonita costumbre de que TAG Heuer presente un Monaco para celebrar cada nueva edición del Gran Premio de Mónaco de Fórmula 1, que se llevará a cabo el domingo 28 de mayo. Esta vez son tres cronógrafos que significan un hito, pues es la primera vez que la marca usa una carátula esqueletada en esta colección. Además, cada uno tiene un color con un significado especial.
Lanzado en 1969, el Monaco de TAG Heuer fue el primer cronógrafo automático cuadrado y resistente al agua. Es uno de los pilares de la firma suiza, que siempre ha tenido una relación muy especial con el automovilismo. Heuer, como se llamaba la empresa en ese entonces, lo lanzó para presentar el Calibre 11, el primer mecanismo de cronógrafo de carga automática del mundo. Tenía otros dos rasgos bastante peculiares: la corona estaba del lado izquierdo y la carátula era de color azul. Una serie de circunstancias afortunadas vincularon al Monaco con el actor Steve McQueen, conocido como “The King of Cool”, quien lo utilizó en la película Le Mans, de 1971. Por todo lo anterior, es un icono hecho y derecho.
La carátula de los tres TAG Heuer Monaco esqueleto se ha abierto de modo que tiene un aspecto futurista. Se conserva la parte de la placa con la escala de segundos y los totalizadores cuadrados de 30 minutos a las 3 horas y de 10 horas a las 9. Los índices de las 5 y las 7, y de las 11 y la 1, están unidos en una especie de puente. El puente de abajo sostiene la aguja del pequeño segundero y una flecha que indica la fecha en la rueda que ha quedado al descubierto; el de arriba sostiene el nombre «Monaco» y el logotipo de TAG Heuer. Todo lo demás se ha recortado.
La nueva versión «Original Blue» se inspira en la primera carátula azul del TAG Heuer Monaco de 1969. Los colores azul y rojo aparecen en la esfera. Además, el azul se utiliza en la rueda de pilares y los grabados de la masa oscilante del movimiento.
El modelo «Racing Red», explica la firma, hace un guiño al ADN de carreras del TAG Heuer Monaco. El color rojo evoca las chispas que producen los coches de carrera al contacto con el asfalto. La carátula tiene toques de negro y plateado, mientras que la rueda de pilares y los grabados de la masa oscilante del movimiento también son rojos.
La tercera variante es el «Turquoise», una elección que responde a la visión vanguardista tan propia de TAG Heuer. Evoca la costa de Mónaco y se aprecia en la carátula, la rueda de pilares y los grabados de la masa oscilante.
Los tres TAG Heuer Monaco esqueleto tienen una caja de titanio de grado 2 arenado, un material resistente y ligero, de aspecto técnico y contemporáneo. Los índices tallados y las agujas cuentan con tratamiento Super-LumiNova. También la ventana de la fecha tiene material luminiscente, lo que es una primicia para la colección Monaco. Todo esto garantiza una legibilidad óptima de día y de noche.
Vienen con unas innovadoras correas hechas en caucho y cuero para mayor comodidad. Están disponibles en negro o azul. Los impulsa el calibre Heuer 02, un movimiento automático de fabricación propia que ofrece 80 horas de reserva de marcha y se puede apreciar a través del fondo de cristal de zafiro de la caja. Independientemente de lo que pase en la pista, con estos relojes TAG Heuer ya ganó el Gran Premio de Mónaco 2023.