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Chevrolet sabía que para mantener, e incluso incrementar su participación de mercado, debía ofrecer un gran producto que tuviera un precio muy atractivo y en el segmento de las camionetas más arriba de Tracker...
Chevrolet sabía que para mantener, e incluso incrementar su participación de mercado, debía ofrecer un gran producto que tuviera un precio muy atractivo y en el segmento de las camionetas más arriba de Tracker y debajo de Blazer, y ese es Chevrolet Captiva 2022.
En mi pensar, casi como si fuera el exitoso Onix en los sedanes, pero en “crossover” compacto de hasta siete pasajeros. Lo sabía porque en el segmento la competencia es feroz. Así, llega Chevrolet Captiva 2022 en dos y tres filas de asientos, motor muy eficiente pero de 144 caballos de potencia, un gran diseño –tal es el cambio que tendrá que acercarse a descubrir que efectivamente es un Chevrolet–, un enorme techo panorámico que, sin duda, es de vehículos de segmentos mucho más altos de mercado al igual que su pantalla central de un tamaño solamente visto en esos nichos de lujo o alta tecnología –innovación en el segmento– y un ingenioso sistema de segunda fila que permite doblar los asientos para entrar a las dos plazas traseras, o eliminarlas para hacer más grande su espacio de carga.
Quizás no se entendería hoy Chevrolet sin la innovación en diseño de sus vehículos, de hecho, es una de sus grandes virtudes actuales.
Han sabido incrementar el atractivo de sus autos con cada día más calidad interior –innegable si ve todos los plásticos, pieles y gamuza que usa hoy en varios de sus autos–, dar más tecnología que nunca como los que ahora traen espejos retrovisores virtuales, y el diseño de toda la marca, falta ver los nuevos trazos de sus camionetas, Suburban y Tahoe, o el Corvette.
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La misma Tracker o la que considero empezó todo siguiendo las líneas del Camaro, la Blazer. Así como de Blazer solo le quedó el nombre a Captiva también. Volvamos al vehículo en cuestión, entrará en un segmento que estimamos empezará en alrededor de los 450,000 pesos y quizás se suba a más de 500,000 en sus tres versiones que serán la LT –única con dos filas–, XLT y la Premier, esta última es la que cuenta con el techo panorámico, ajustes de asiento de conductor eléctrico, rines diferenciados en diseño, cámara de reversa y freno de mano eléctrico.
En la gama que bien pensaron para contar con volumen por el valor en el precio, todas tendrán el mismo motor de 1.4 litros, el mismo tablero digital que es personalizable en su parte central, el atractivo de una gran pantalla central, mismos frenos antibloqueo, 4 bolsas de aire y el valioso sistema de tracción, StabiliTrak.
El manejo es de una buena “crossover” mediana con la gran ambición de llegar a familias que desean un gran espacio para todos los días, incrementarlo para carga o bien tener invitados y no sufrir por tener solo cinco plazas.
Está muy bien pensada para la eficiencia en familias y a mi parecer –pues en diseño se rompen géneros– se une a un contingente que innova en sus líneas de diseño poniendo énfasis en cuerpos ópticos innovadores, muy vanguardistas delanteros.
No pensé ver algo así en Chevrolet, pues es la primera que nos brinda una línea lumínica frontal y como que desaparecen las dos partes que llevan habitualmente las parrillas de sus vehículos –por lo menos en la versión Premier–. Un diseño de tercer poste innovador y una parte trasera francamente europea, con lo cual seguramente competirá de manera frontal con grandes exponentes en el segmento. Los distribuidores deben estar felices de recibir un producto así a tal precio y los que ya han cambiado a Chevrolet en su nueva era de producto, ahora encontrarán valor en una camioneta que cumple a familias que desean flexibilidad.
