Ogier encabeza el 1-2 de Volkswagen después de un dramático inicio del Rally

La dupla francesa conformada por Sébastien Ogier y Julien Ingrassia sobrevivió a un dramático inicio del 12° Rally Guanajuato Corona y superó la desventaja de ser el primero en el camino para colocarse en la delantera con una diferencia de 13.5 segundos después de 10 etapas especiales en la tercera fecha del Campeonato Mundial de Rally FIA.

En lo que fue un día lleno de incidentes, donde los choques espectaculares y una alta tasa de deserción entre los líderes acapararon los encabezados, los actuales campeones mundiales fueron un modelo de constancia en su Volkswagen Polo R WRC.

Cuando el retador más cercano de Ogier, el belga Thierry Neuville, sufrió una ponchadura y volcó su Hyundai i20 WRC para dejar el segundo lugar en la SS8, Ogier mantuvo la velocidad hasta el final de la etapa delante de su compañero de equipo en Volkswagen, Jari-Matti Latvala. El finlandés, por su parte, sobrevivió a un susto en la última etapa súperespecial.

“Es bastante impresionante mantener el liderato después de haber sido el primero en el camino esta mañana”, comentó Ogier. “Ha sido muy difícil y tuvimos que presionar desde el primer minuto hasta el final, pero estoy muy satisfecho con esto y mañana no tengo que salir a barrer el camino”.

Ott Tanak y Raigo Molder del equipo M-Sport World Rally Team fueron muy afortunados al sobrevivir a una dramática zambullida en una presa ubicada junto al camino en la tercera etapa. Su Ford Fiesta se volcó y cayó al agua, pero la dupla originaria de Estonia pudo ponerse a salvo justo antes de que el auto se hundiera y desapareciera bajo el agua. El auto fue recuperado la tarde del viernes.

“El día de hoy vivimos una experiencia difícil”, declaró Tanak. “Frené muy fuerte en un hoyo, lo cual dañó la suspensión delantera del lado derecho. En la siguiente curva hacia la izquierda no pudimos girar el auto y nos salimos del camino. La caída estaba tan empinada que rodamos hasta llegar al agua. Afortunadamente el auto cayó parado, pero estaba tan profundo que se hundió rápidamente. En cuanto abrimos las puertas el auto desapareció en unos cuantos segundos. También tuve un problema con el cable de mi intercomunicador porque no lo podía zafar y me estaba jalando hacia abajo. No fue una experiencia agradable”.

Ogier fijó el mejor tiempo en los 4.6 km de la etapa súperespecial y amplió su liderato sobre Latvala a 13.5 segundos.