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¡Qué bonito es un auto recién detallado, limpio y aspirado! Pero, ¿está desinfectado? Si te fijas, cuando lo mandas a lavar a un taller, sólo pasan un trapo con agua al interior del auto,...
¡Qué bonito es un auto recién detallado, limpio y aspirado! Pero, ¿está desinfectado? Si te fijas, cuando lo mandas a lavar a un taller, sólo pasan un trapo con agua al interior del auto, es decir, falta desinfectar a detalle. Y créeme, después de leer esto, querrás que esté desinfectado en forma.
¿Cuál crees que sea la parte más sucia de un auto? Quizá pienses que los tapetes del auto (¡error!). ¿O qué tal la cajuela? Finalmente allí se carga una gran variedad de cosas (¡error!).
Pues, aunque no lo creas, ¡el volante de un auto tiene nueve veces más gérmenes que el asiento de un baño público!
Sin embargo, por sí mismo, el interior de un auto tiene cientos y cientos de bacterias. Un estudio en Reino Unido señaló que mientras 80 bacterias acechan en cada pulgada cuadrada del inodoro, alrededor de 700 bichos dañinos habitan en el interior del auto.
¡Voilá! Como te imaginarás, comer en el auto es uno de los principales responsables. Finalmente, el 42 % de los automovilistas comen mientras conducen. Tal como han compartido los microbiólogos de la Universidad de Nottingham, el virus más común es el bacillus cereus, el cual puede provocarintoxicación alimentaria.
Este virus es común en el arroz, la pasta, las papas y las empanadas. Alimentos que son consumidos frecuentemente de manera rápida.
También la famosa bacteria E.coli, causante de infecciones estomacales, urinarias, entre otras, está presente no sólo en el volante, sino el freno de mano.
A todo esto se añade el hecho de que únicamente un tercio limpió el interior de su auto una vez al año. Es decir, dos tercios no lo hicieron. Y ni hablemos de desinfectar. ¡Zaz!
¿Te comerías algo que lleva meses fuera del refrigerador? Obviamente no. Imagina que es lo mismo con tu auto, donde las pequeñas partículas de comida se echan a perder.
Sin embargo, considerando que según una encuesta tres quintas partes de los automovilistas comen al volante, y además la mitad de los automovilistas dejan caer comida y bebidas en los asientos, es indispensable limpiar y desinfectar el interior del auto frecuentemente.
No basta con limpiarlo una vez cada tres meses, tal como lo hace únicamente una cuarta parte de los automovilistas.
Aunque bueno, si entras dentro del uno de cada veinte que ha encontrado comida podrida, con que lo limpies, aunque sea cada tres meses, está bien. ¡Mejor eso que nada!
