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Cada olor nos da una pista de lo que va mal con el auto
¿Cómo saber si el olor de tu auto es de origen externo o por una falla mecánica? El primero generalmente es causado por restos de comida, humedad o el humo de cigarro. Esto se soluciona limpiando a profundidad, quitando los tapetes, mover los asientos y buscar en las orillas de la cajuela para identificar el origen.
Sin embargo, si es de origen mecánico, se soluciona depende del problema subyacente. Con información de Lifewire, el tipo de olor puede indicarnos su origen.
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Dulce – fugas en el núcleo de calentador.
Moho – el agua se está metiendo en el auto. Puede ser el aire acondicionado o las ventanas no están bien selladas.
Acre – embrague quemado, desgastado, desajustado o pueden ser los frenos.
Aceite quemado – aceite que gotea sobre el colector de escape.
Gas – si tiene carburador, es normal después de apagarlo; si es nuevo y huele crudo, no es buena señal.
Azufre o huevo podrido – malos convertidores catalíticos; puede ser la transmisión manual y el aceite de la caja de transferencia.
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Ya sea de origen externo o por falla mecánica, es importante evitar tapar el olor y siempre atacar el problema de raíz. Una vez solucionado, puedes apoyarte utilizando bicarbonato de sodio y carbón vegetal en el auto para que absorba los olores.
Hay personas que recurren a ionizadores y purificadores de aire. Sin embargo, esto debe realizarse únicamente si se ha detectado la causa. Pero, finalmente, si ya sabes qué lo estaba ocasionando, no será necesario usar purificadores, debido a que el olor desaparecerá. A menos que desees tener mejor calidad de aire, por supuesto.
El uso de bicarbonato de sodio puede ayudar a eliminar olores muy arraigados. Sin embargo, te aconsejamos realizar una profunda limpieza del auto. Recuerda que el uso continuo de fragancias y perfumes ¡es perjudicial para tu salud respiratoria!
Por último, el llevar tu auto a servicio, el revisar los niveles y conducir suavemente evita que las averías nos tomen por sorpresa.
¿Te ha pasado?
