Si hablamos del futuro de la movilidad, todo parece indicar que es necesario que cohabiten distintos medios de transporte. No sólo motos y autos: bicis, scooters, peatones, ¡y hasta autos voladores! ¡Suscríbete a nuestro...
Si hablamos del futuro de la movilidad, todo parece indicar que es necesario que cohabiten distintos medios de transporte. No sólo motos y autos: bicis, scooters, peatones, ¡y hasta autos voladores!
Sin embargo, hoy por hoy, los accidentes y altercados entre motociclistas y automovilistas siguen siendo un problema.
El tener un vehículo, cualquiera que sea, es una responsabilidad. Tanto motociclistas como automovilistas deben ser precavidos, conocer sus propios límites y los de sus vehículos.
Más allá de una cultura vial, también es necesario un sistema e infraestructura en donde todas las formas de movilidad tengan su espacio seguro de transportarse.
Además, las reglamentaciones deben ser claras y llevarse a cabo. También, los vehículos deben contar con un correcto equipamiento, especialmente en las motos.
En Europa existe un carril, entre el de alta y el de en medio, que está destinado para las motos.
Sin embargo, incluso allí, los accidentes son comunes. La cifras de muertes de motociclistas en Europa rondan alrededor de las 5,000 anuales.
Los esfuerzos de movilidad para motociclistas se destinan para las siguientes áreas:
– Una correcta formación para obtener permiso de conducción.
– Equipamiento completo de seguridad de la moto, incluyendo sistemas y tecnología de frenado.
– Educación, proyectos de investigación y sensibilización sobre la responsabilidad y la seguridad de motociclistas.
Uno de los grandes problemas en México es la impunidad y la corrupción. Esto genera una flexible y tibia responsabilidad en el cumplimiento de la reglamentación por parte de los conductores de transporte público, automovilistas y motociclistas.
El objetivo de cumplir el reglamento es preservar la vida, por lo que no deberíamos necesitar el «castigo» para hacer las cosas.
Por parte de los motociclistas, de forma obligatoria ellos deben acatar principalmente las siguientes reglas:
– No rebasar entre carriles. Todo vehículo puede rebasar sólo por la izquierda.
– Tanto el conductor como el acompañante obligatoriamente deben usar casco.
– El conductor debe tener ambas manos sobre el manubrio.
– No deben invadir el cruce peatonal en semáforos. Necesariamente, deben esperar en su área asignada.
– Deben mantener sus luces delanteras y traseras encendidas, así como usar equipamiento luminoso durante la noche.
Por supuesto, todo esto suma a: tener licencia vigente, placas, no exceder el límite de velocidad, no manejar en contraflujo, hacer uso de las direccionales e intermitentes, etc.
En realidad, si todos fueran precavidos, habría una cultura vial mucho más eficiente y con menos accidentes.
Sin embargo, hay muchos factores que no ayudan.
1. Los motociclistas rebasan entre carriles. Pero, los automovilistas tampoco están al pendiente de esta realidad.
2. El «uno por uno» o el «ceder el paso» no es una práctica que todos implementen. Por el contrario, es más común que se te cierren.
3. Pocos guardan un espacio considerable. Si respetas la distancia que debes llevar con el vehículo de enfrente, generalmente otros vehículos presionan o se meten en dicho espacio.
4. Existe una deficiente planificación de las calles, hay hoyos y pavimento irregular.
5. Muchas zonas de la Ciudad de México no tienen una lógica en cuanto al sentido y dirección de la calle. Para quien no conoce la zona, constantemente puede estar confundido con los sentidos de las calles.
6. Cada quien ve por su propia conducción. En lugar de visualizarse como una actividad colectiva, cada quien ve por sí mismo, teniendo como única prioridad llegar a su destino.
A pesar de que el gobierno ha actualizado los reglamentos en esta área, no han habido programas formativos ni de educación que los refuercen.
La mayoría de los esfuerzos se han concentrado en los alcoholímetros, ciclovías, Ecobicis, segundos pisos, etc.
No debemos esperar a que sea el gobierno quien tenga la iniciativa de lanzar los programas. Actualmente, el acceso a internet y las redes sociales personales de alto alcance permiten difundir y crear campañas de información.
Para todos aquéllos indignados con esta problemática, y que se han visto envueltos en algún accidente o altercado, es necesario que abran un diálogo para ofrecer soluciones.
A su vez, si eres un motociclista responsable, ayudaría mucho que compartieras tu experiencia y tu perspectiva para todas las personas que no conocen cómo funciona este medio de transporte en la calle.
Al final, el automovilista va dentro de una bala protectora. Sin embargo, el motociclista es la bala misma. Los accidentes de moto son mucho más fatales y de alto riesgo.
Ambos medios de transporte deben aprender a respetarse y entenderse. Si logramos sobrellevar positivamente esta comunicación y cultura vial, mejorará nuestra convivencia como ciudadanos.