¿Cómo impactará #Brexit a la industria automotriz?

Las armadoras ya habían anunciado que su margen de ganancias podría ser golpeado tras el abandono del Reino Unido con respecto a las políticas de la Unión Europea, confirmada hace algunas horas. Sin embargo, lo que era una mera especulación se ha convertido realidad, una que podría elevar el gravamen de las importaciones de vehículos a los Estados Unidos hasta en 10%.

Reino Unido es el segundo mayor productor de autos en Europa, luego de Alemania

La razón principal es que las empresas británicas, aunque son propiedad de algunos grupos extranjeros, deberán negociar ahora con el principal mercado de automóviles en América, los Estados Unidos.

Las negociaciones arrancarán un proceso de 2 años de negociación, durante el cual se fijarán las tarifas de importación de vehículos a dicho país, por lo que el costo de arancel podría impactar directamente al productor y –quizás– el costo del vehículo.

Todo productor de automotores que desarrolle producto en el Reino Unido, por ejemplo: Nissan, cuyo número mágico ronda el medio millón de autos anuales, de los cuales un alto porcentaje son vendidos en el extranjero. Toyota, que exporta 190 mil vehículos de los 200 mil producidos en suelo británico. Ford cuenta con tres plantas europeas, en donde fabrica motores y cajas de transmisión, y ya expresó que tomarían medidas a favor de mantenerse competitivos. Honda es otro japonés que cuenta con planta en Inglaterra, en donde produce Civic y CR-V para 140 mil ejemplares al año, lo cual podría impactar en $8.9 billones de acuerdo a una investigación por parte de Arndt Ellinghorst.

Breaking: la libra esterlina cayó 8% a partir del anuncio, alcanzando su peor nivel desde 1985. Finalmente se especula que pudiera haber un incremento en el precio de los vehículos hechos en Reino Unido, incluso en el mercado local, pero que además esto podría desencadenar una guerra comercial que pondría mucha tensión entre Reino Unido y los Estados Unidos, que ya mostraron su molestia. Las acciones de Tata cayeron 12% al día de hoy, alcanzando el peor registro desde 2012, sin embargo se declaró que continuarán sus planes de producción europea, es decir: Eslovaquia sigue en pie como siguiente planta para la armadora. Se espera que las ventas en Reino Unido caigan 4.5% este año.

La industria busca mantener la tarifa libre entre Gran Bretaña y Estados Unidos, con lo cual no habría afectación por este departamento. Mientras algunas armadoras ya han mencionado que están viviendo momentos de incertidumbre, por lo que no pueden adelantar ningún. General Motors y su división europea Opel, proponen que Reino Unido forme parte de lo que se conoce como Zona Económica Europea, para el libre comercio y circulación de personas como sucede con Suiza, Noruega e Islandia.

Portafolio británico: Mini Cooper y Rolls Royce (BMW Group); Jaguar Land Rover (Tata Motors); Bentley (VW Group); Aston Martin (Prodrive), entre otros.

*La mitad de los 2.6 millones de vehículos que se venden en el Reino Unido son construidos por empresas alemanas, mientras que Alemania exporta 810,000 vehículos de pasajeros a los países de Gran Bretaña. Alrededor del 57% del 1.6 millones de coches hechos en Gran Bretaña se exportaron a países de la Unión Europea.

Volkswagen menciona que es demasiado pronto para tomar medidas al respecto, y para suponer cómo impactará a su marca Bentley.

Mercedes-Benz, a través de su CEO, mencionó «No es un buen día para Europa, y tampoco para el Reino Unido. Geográficamente podrán ser una isla, pero política y económicamente, no. Es esencial que Europa no siga perdiendo integrantes».

Corea del Sur se mostró preocupado, pues dicho anuncio podría venir acompañado de un incremento de tarifa que reviva el impuesto del 10% antes de la Unión Europea, lo cual determinaría el precio y competitividad de las empresas Surcoreanas en el Reino Unido, mencionó Kim Te-nyen, Vicepresidente de la Asociación de Productores de Automóviles.

ESCRITO PORMarco Alegría

Entusiasta de la comunicación y la actividad del periodismo ejercidos con profesionalismo. Manejo desde los 13 años, pero –en la actualidad– sigo jugando a los carritos.