Nissan Hikari: Un Tsuru II muy especial

El Tsuru. Quizás el automóvil más emblemático de la firma japonesa es el ideal representante para la simpleza, la confiabilidad y la seguridad. No obstante, en 1986 llegaría una versión tan especial dentro de la gama que obtendría su propio nombre. Estamos hablando por supuesto del Nissan Hikari. 

Hoy en #ViernesVintage repasaremos la llegada de la segunda generación del Tsuru así como todo lo que tienes que saber de la variante Hikari. Hecho orgullosamente en México, descubramos qué fue lo que hizo que este ejemplar fuera tan bien recordado en nuestro país. 

El Tsuru II: un regreso triunfal

Para entender a Nissan Hikari es necesario desenvolver la historia del Tsuru. La primera generación, introducida en 1984, fue la variante mexicana del Nissan Sentra, también conocida como Sunny en Asia. Fabricado en la planta de Cuernavaca, se reporta la producción de una sorprendente cifra de 210,565 Tsurus de primera generación en México. 

De ahí, partiríamos al Tsuru II que llegaría a nivel internacional en 1986 aunque no lo veríamos en México sino hasta 1987. El Tsuru II contaba con tres variantes de carrocería. El sedán de 4 puertas y 2 puertas; además una variante estilo vagoneta muy similar a lo que habíamos visto en Nissan Samurai. 

Todos los Tsuru II venían equipados con un motor E16 de 4 cilindros con 70 caballos de potencia. Una transmisión manual de 5 velocidades era la oferta inicial aunque también se añadiría una opción de 3 velocidades en una caja automática.

Tsuru II mantendría una estética virtualmente idéntica durante su breve instancia. Sin embargo, para 1989 sufriría un ligero cambio la carrocería del sedán. Sería más largo y con faros direccionales ligeramente más redondos. También el logo de Nissan pasaría de la parrilla central a la esquina derecha y al centro. 

Digno de exportación

El Tsuru II fue todo un éxito. Vendería 343,263 ejemplares fabricados en México que serían exportados a mercados como el de Perú, Chile y Bolivia gracias a su sensacional confiabilidad. Sin embargo, no fue gracias a la reputación de Nissan Hikari que terminó por consolidar al Tsuru como uno de los vehículos más populares en Latinoamérica. 

El Nissan Hikari es una versión con carrocería de estilo coupé de Nissan Tsuru II. Pero si crees que solo se trata de un cuerpo diferente, estás muy equivocado. Esta versión se trata de la gama más deportiva y deseada del Tsuru II. 

Mientras las versiones regulares del Tsuru II presumían rendimientos de combustible superiores a los 18 kilómetros por litro además de su suspensión independiente de tipo McPherson, el Hikari se llevaría toda la atención por su diseño único y atractivo. 

Existían dos versiones de Hikari. La primera llamada Hikari Coupé contaba con el mismo motor del Tsuru II pero con la adición de espejos eléctricos, aire acondicionado, mecanismo interno de apertura de cajuela, un volante deportivo y un estéreo digital. 

¿Un motor turbo en un Tsuru?

Pero si hablamos de joyas, por supuesto el ejemplar más emocionante fue el Nissan Hikari Turbo. Esta versión contaba con un motor exclusivo de Turbo EGI de 1.6 litros. Esto le permitía generar hasta 96 caballos de potencia. 

Podías distinguir esta iteración mediante su quemacocos, su spoiler trasero y los asientos con buen soporte lateral. Hikari Coupé duraría hasta 1991 hasta ser eventualmente reemplazado por la tercera generación de Tsuru. La versión turbo de Hikari solamente se comercializaría en el año de 1988. 

La marca japonesa obtendría un primer lugar en ventas en nuestro país a partir de esta segunda generación de Tsuru. El Hikari era un automóvil súper codiciado gracias a su fama de ser súper confiable y ligero para un gran manejo. 

Parece ser que la única queja de los clientes sobre Hikari sería su limitado espacio interior.  Aunque tenía asientos en la parte trasera, eran muy incómodos y de difícil acceso. Por lo tanto, Hikari tenía que ser pensado como un vehículo para dos pasajeros. 

A pesar de todo, Hikari sería recordado por su icónico motor turbo y su gran diseño. Reemplazado eventualmente con el Nissan Tsuru III, desgraciadamente no volveríamos a ver una alternativa de motor turbo dentro de la familia Tsuru. Sin embargo, queda más que claro que con Hikari el Tsuru se consolidó como uno de los coches mejor vendidos en nuestro país. 

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