Posiblemente su versión más querida en la historia.
Muchos consideran que el Toyota Supra A80 que se produjo en la década de los 90 fue su mejor versión. La cuarta generación del coche quedó marcada para siempre como la iteración más reconocida de Supra. Además, contribuyó enormemente para su revitalización en 2019 después de constantes pedidos de los fans para revivirlo. ¿Pero qué lo hacía tan especial?
El Toyota Supra A80 se produjo entre 1993 y 1998, convirtiéndose en su última versión hasta la actualización de 2019. A pesar de que el primer modelo Supra llegó en 1979, esta cuarta generación sería el modelo definitivo que le otorgaría fama mundial.
Este proyecto liderado por Isao Tsuzuki y elaborado en el Toyota Technical Centre Aichi pasó mucho tiempo “congelado” dentro de Toyota en lo que se perfeccionaba. Después de los primeros prototipos en 1991, todos hechos a mano, finalmente llegó la producción oficial en masa en abril de 1993. Destacó por su icónico diseño noventero con un alerón trasero enorme, llantas de dimensiones pequeñas y su corto tamaño. Al interior, contaba con una consola enfocada al conductor y asientos de piel.
El enfoque de Toyota estaba primordialmente en hacer de este coche un monstruo. Para ello, se le adaptó el legendario motor 2JZ con 220 caballos y 210 libras pie de torque. Éstas fueron las cifras oficiales. Sin embargo, debido al acuerdo entre caballeros de los fabricantes japoneses de producir motores menos potentes para promover la seguridad, muchos decían que en realidad el motor era todavía más rápido.
Parte de la razón por la cual el Toyota Supra A80 se convirtió en leyenda fue gracias al modelo biturbo. Con su motor 2JZ-GTE se elevaron los caballos de fuerza a 275 con 318 libras pie de torque en el modelo japonés. Y para las versiones exportadas a mercados europeos, la cifra subió todavía más: 321 HP con 315 libras pie de torque.
Esto significó que la variante turbo cargada aceleraba de 0-100 kilómetros por hora en menos de 4.6 segundos. La prueba para obtener su velocidad tope reveló que llegaría hasta los 257 kilómetros por hora, convirtiéndolo en uno de los coches más rápidos en el planeta en la década de los noventa.
Tanto así que Toyota cobraba el equivalente a 70,000 dólares por una versión Turbo. Sin embargo, si llegaste a pagar ese dinero, valió totalmente la pena. Porque actualmente, un ejemplar que no ha sido modificado con la transmisión manual Getrag de 6 cambios se vende por más de 100,000 dólares actualmente.
Además de su velocidad, el Toyota Supra A80 ganó estatus mundial por dos eventos importantes. La primera fue su aparición en el videojuego legendario de PlayStation Gran Turismo, donde el Supra era uno de los coches más famosos y emocionantes a escoger.
Más adelante, el carro ganó todavía más reconocimiento al aparecer como el hero car de Paul Walker en la cinta de Rápido y Furioso. La comunidad de tuning apreciaba mucho el Supra por su alta capacidad de resistir modificaciones que elevaban su potencia hasta a 1000 caballos.
La cuarta generación de Supra dominó la época de los noventa. Fue uno de los grandes contribuidores en poner un nombre a los deportivos japoneses junto con Subaru WRX, Mazda RX-7, Nissan Skyline y Mitsubishi GTO. Sin lugar a duda, una leyenda de la historia automotriz que ahora mismo es uno de los modelos más codiciados en el mundo.
Continúa con nuestro canal de Youtube para nuestras pruebas en video