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La Clase G lleva 40 años de presencia, un modelo que ha mantenido sus características, pero al que ya le tocaba una renovación. El resultado es impresionante.
La Clase G lleva 40 años de presencia en el mercado, un modelo que ha mantenido sus características, pero al que ya le tocaba una renovación… y el resultado es impresionante.
Estamos hablando de que Mercedes-Benz no había considerado adecuado realizar algún cambio a la Clase G, por lo que ahora se ha presentado una segunda generación, con una renovación profunda.
Esta nueva generación fue planeada meticulosamente, debido a la trascendencia del modelo. La Clase G posee una base de entusiastas, lo que hace aún más difícil algún cambio radical.
Pero Mercedes-Benz lo ha logrado con gran maestría. La Clase G mantiene el mismo chasis, tipo escalera, el cual fue mejorado para reducir su peso, pero manteniendo sus cualidades para mantener la torsión.
El uso de elementos como aluminio en algunas partes de la carrocería, ha permitido reducir el peso de la Clase G en 150 kilogramos. De igual manera, el diseño ha tomado ligeras líneas exteriores, para mejorar la aerodinámica. Recordemos que desde 1979 la Clase G poseía esa imagen con líneas rectas en el exterior de la carrocería.
De igual manera, los 8 cristales que se utilizan en el vehículo recibieron ligeras curvaturas en su diseño, a diferencia de la generación anterior donde eran completamente rectos.
Respecto al tren motriz, porta un poderoso motor V8 biturbo de 4.0 litros, el cual desarrolla 422 caballos de potencia y 449 libras-pie de torque. Se acopla a una transmisión 9 G-Tronic, además de contar con la tracción 4Matic.
En México está disponible en dos versiones, la G500 así como la G63 AMG, la cual posee un motor diseñado por el especialista de Affalterbach, y que fue llevado hasta los 585 caballos de potencia.
Una de las grandes virtudes de la Clase G es su capacidad para cruzar caminos donde termina el asfalto. Por ello, Mercedes-Benz ha integrado alta tecnología para cumplir con las tareas fuera del camino.
Es por ello que posee tres bloqueos de diferencial, los cuales se pueden activar manualmente y enviar toda la potencia a una sola rueda para obtener la tracción en caso de ser necesario.
Gracias a su diseño, ofrece buenas características para actividades off-road. La Clase G tiene una capacidad de vadeo de 700 milímetros, un ángulo de ataque de 29.9 grados, y de 30.9 grados en salida. Posee un ángulo ventral de 25.7 grados.
Cuenta con cinco programas de conducción en sus sistema Dynamic Select, además de asistencia en estacionamiento.
Al interior también se han cuidado todos los detalles para incrementar el confort y lujo. Destacan las dos pantallas en la consola, las cuales son de 12.3 pulgadas cada una. La pantalla central es de gran utilidad, además se ser atractiva, debido a que brinda la información cuando realizamos alguna maniobra fuera del camino, como ángulo de la carrocería, ángulo de giro del neumático. También, el sistema de cámaras asiste para visualizar objetos cercanos, como piedras, antes de maniobrar. La pantalla se puede configurar en tres estilos: Classic, Sport y Progressive.
Clase G se fabrica en Graz y cada modelo se manufactura con gran dedicación, lo que lleva a invertir 100 horas de trabajo por cada modelo producido, una muestra de que Mercedes-Benz mantiene un alto nivel de calidad para satisfacer a los clientes más exigentes.
Mercedes-Benz G500 tiene un precio en México de 2 millones 999 mil pesos en tanto que la G63 AMG tiene un precio de 3 millones 750 mil pesos.
