El new Beetle verá su última unidad ensamblada este próximo miércoles, cuando se acabe toda una era en cuanto a formas automotrices.
El new Beetle verá su última unidad ensamblada este próximo miércoles, cuando se acabe toda una era en cuanto a formas automotrices. No hay quien no tenga presente la silueta del Volkswagen Sedán original –inició su venta en México en marzo de 1954, su fabricación en 1961 y la demanda fue tal que para 1965 se abrió la planta de VW Puebla–, y a partir de que a principios de los noventa nos enseñaron el Beetle, la forma seguía, como un tributo a lo que fue uno de los autos más exitosos en la historia. Hacerlo no fue fácil, desarrollar partes curvas y caprichosas como las puertas o los espejos retrovisores, el gran tablero o sus vidrios curvos, mereció todo un desarrollo que valió la pena hacer, hoy vemos el último nacer y morir a este gran ícono, que hizo de VW Puebla su hogar desde donde todo el mundo lo recibía. Ahora quedará en los museos, pues el mercado cambió, se fue a camionetas y por el otro lado el Beetle nunca quiso ser una de ellas, con versiones más altas, todo terreno o más aventurero. Así, el Beetle queda en la memoria con su florero junto al volante que efectivamente algunos sí usaron para mostrar la nostalgia por el “Flower Power” de los años sesenta. Adiós Beetle, bienvenida la producción de productos de mayor volumen. Así el 23 de octubre de 1967 salió el primer VW Sedán de Puebla, la última edición de él fue en 2003, y ahora el 18 de junio de 2019 saldrá el último Beetle de la línea de Puebla.
En las últimas dos semanas la marca de la estrella ha delineado una estrategia para los próximos doce meses donde las camionetas o “crossovers” serán el foco de su estrategia y eso que aún no ha sido el Auto Show de Frankfurt –mediados de septiembre– donde habitualmente presenta sus mayores novedades.
Sorpresivamente, el viernes presentó su nueva arma secreta: se llama GLB, es hecha en Aguascalientes en la planta que tiene en conjunto con Nissan, cuenta con hasta siete asientos y llega a ganar un hueco entre la GLA y a GLC, justo en el corazón de productos de volumen. Con toda la tecnología nueva de la marca, motores renovados y con muchas posibilidades de ser híbrida o híbrida enchufable y hasta 100% eléctrica con un EQC de este tamaño, la nueva Clase B se adaptará perfecto a un mercado que busca espacio, pero también a la estrella y no en segmentos de precio mayores. Estará hacia finales o principios del 2020 llegando al país.
A esta se le unen dos muy importantes en la gama, por un lado, la renovación de la GLC, con los interiores nuevos y tablero digital. Rediseño exterior y para fin de año estará en distribuidoras para retomar el ser una de las más vendidas de la marca.
Y por el extremo de más lujo, tamaño y equipamiento, la Clase GLS, la marca la presentó ya en pruebas dinámicas dentro y fuera de camino y estará lista para el próximo año en el país, lo tiene todo y más por lo que resulta sorprendente descubrirla.