Los dos conductores y en general el equipo están conscientes de que aún no se está en el nivel adecuado de desarrollo del monoplaza VJM08, pero hay coincidencia en el empuje general de trabajo para alcanzar la posición de competitividad. Sobre todo que no será sino hasta la «temporada europea» cuando se introduzca un importante paquete de actualizaciones en el nuevo auto.
No obstante, al mexicano Checo Pérez el GP de Bahréin le trae mucho y muy buenos sentimientos, ya que ahí ha logrado el triunfo en GP2 y el pasado año subió al podio con un tercer lugar –el cuarto en su carrera en F1- y en general ve con optimismo esta prueba, en un trazado de Sakhir que siempre le ha tratado bien.
Checo Pérez:
«Regresar a Bahréin me trae muchos y muy buenos recuerdos. La carrera del año pasado tuvo todo lo que puedes pedir: mucha acción, un gran rendimiento y por supuesto finalizar en el podio. Es un buen circuito para mí; gané ahí en la GP2 y en general siempre he tenido buenas carreras, así que se siente bien regresar».
«La pista en sí es un circuito de frenar y continuar, con largas rectas, zonas de frenado constante seguidas de unas de rápida aceleración. La degradación de los neumáticos traseros es bastante alta y esperamos que sea uno de los temas de esta carrera. El agarre es siempre un reto con todo el polvo que sopla en la pista; la superficie cambia mucho durante el fin de semana y la carrera en sí. Hay dos zonas de DRS y algunas buenas oportunidades de adelantamiento, especialmente en el primer sector: esto debería hacer una buena carrera».
«La última carrera en China fue interesante para nosotros, ya que hemos sido capaces de estar mucho más involucrados en las batallas contra los otros equipos. A medida que seguimos aprendiendo sobre el coche y su puesta a punto, estamos cerrando la brecha con nuestros rivales, lo que es realmente alentador. Todavía hay un largo camino por recorrer, pero todo el mundo está trabajando duro para ello y espero que pronto superaremos el reto para estar consistentemente en los puntos».