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La firma inauguró un nuevo laboratorio de motores eléctricos en Shanghai, China.
El camino hacia la electrificación ahora se enfoca en dos factores indispensables: Baterías y Motor eléctrico. Es por ello que Volvo se encuentra realizando inversiones que permiten el diseño y desarrollo internos de motores eléctricos.
Este es un paso en el camino de la firma hacia una marca de autos completamente eléctricos.
Es por ello que la firma inauguró un nuevo laboratorio de motores eléctricos en Shanghai, China. Esta es la última incorporación a su red global de instalaciones para el desarrollo y prueba de componentes de automóviles eléctricos.
El nuevo laboratorio se suma al desarrollo de motores eléctricos en Gotemburgo, Suecia, y laboratorios de baterías de última generación en China y Suecia.
El motor eléctrico es un componente fundamental junto con la batería y la electrónica de potencia. La interacción entre los tres componentes es crucial.
Con el desarrollo de motores eléctricos internamente, los ingenieros de Volvo podrán optimizar aún más los motores, con lo que se podrá obtener más beneficios en términos de eficiencia energética y rendimiento general.
«Al mejorar constantemente sus niveles de rendimiento general en términos de eficiencia energética y comodidad, creamos una experiencia de conducción eléctrica que es exclusiva de Volvo»
Henrik Green, director de tecnología de Volvo Cars
La aceleración instantánea y la conducción con un pedal, son características de los modelos eléctricos. Ahí es donde el desarrollo de nuevas tecnologías beneficiará al automóvil eléctrico.
El laboratorio de motores eléctricos recién inaugurado en Shanghai comenzó a funcionar en octubre. Se centrará en el desarrollo de motores eléctricos para su uso en vehículos totalmente eléctricos e híbridos basados en la próxima arquitectura de vehículos modulares SPA 2 de Volvo Cars.
Cabe recordar que Volvo tiene el objetivo de que el 50 por ciento de sus modelos sean eléctricos para 2025 y el resto sean híbridos. Además de que busca ser una compañía neutral el emisiones para el 2040.
Un primer paso tangible hacia la visión de 2040, tiene como objetivo reducir la huella de carbono del ciclo de vida de un automóvil en un 40 por ciento 2018 y 2025.
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