Estrenan tecnología de asistencia a la conducción, además de mayor conectividad
Dos modelos fundamentales en la gama de la firma española iniciaron producción. SEAT Ibiza y Arona son producidos en la planta de Martorell.
Ambos modelos llegan con un diseño exterior renovado y un interior con mayor tecnología en conectividad.
Ibiza es uno de los modelos más exitosos de la firma, su primer generación se lanzó en 1984 y ha comercializado casi seis millones de unidades.
Por su parte, Arona ha aportado a la firma en el segmento de SUV´s. Se presentó en 2017 y ha comercializado más de 400 mil unidades.
“El SEAT Ibiza es un icono de la industria del automóvil y uno de los pilares clave de la marca, mientras que el Arona fue el segundo modelo de SEAT más producido el año pasado”
Herbert Steiner, Vicepresidente de Producción y Logística de SEAT
El nuevo exterior del hatchback integra faros LED y el emblema con la denominación del modelo en tipografía manuscrita. Por su parte, Arona incluye un nuevo acabado X-Perience. Este nivel va encaminado a una imagen off-road. En la parte trasera destacan faros antiniebla, rediseñados y ubicados en una nueva posición.
Al interior ambos modelos cuentan con nuevos acabados con diseño más elegante. Además, cuentan con mayor conectividad sumando una consola central de tacto blando con el sistema de info-entretenimiento. Posee una pantalla flotante más grande.
Ambos modelos cuentan con conexión inalámbrica Car Play y Android Auto mediante el sistema Full Link.
SEAT ibiza y Arona cuentan con sistemas de asistencia a la conducción, como el asistente de viaje y control crucero adaptativo, ahora también predictivo.
Respecto a la motorización, ambos modelos cuentan con opciones de motor a gasolina y gas natural comprimido, con potencias de entre 80 a 150 HP para Ibiza y de 90 a 150 HP en Arona.