Así Cadillac aprovecha esa magia de la mercadotecnia y la creación de buenos productos para conquistar el mercado automotriz más importante del planeta: China.
La cultura asiática, como muchas otras, están pendientes de una de las economías más importantes del planeta, los Estados Unidos, y la manera en la que erigen a las figuras más importantes de los últimos 100 años.
Así Cadillac aprovecha esa magia de la mercadotecnia y la creación de buenos productos para conquistar el mercado automotriz más importante del planeta: China.
Con un statement tremendamente agresivo, figuras como ex-presidentes de los Estados Unidos, Marilyn Monroe, Muhammand Ali y hasta Elvis, Cadillac seduce a la clientela china, además de desarrollar productos claramente enfocados en los que el mercado demanda.
Lejos quedaron los grandes nombres como Eldorado, Phaeton, DeVille, Fleetwood, hoy los nombres responden a una nomenclatura diferente y mucho más desarrollada a la lógica internacional, buscando crecer el mercado chino y satisfacerlo con inversiones tan importante como la creación de una nueva planta en Shanghái, con 1.2 billones de dólares de inversión para la producción de 160 mil unidades anuales.