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Cuando nos referimos a la visión de las marcas con respecto al futuro inminente de la eliminación de la intervención humana en un vehículo, al menos en algunas ocasiones y trayectos, cada marca vislumbra...
Cuando nos referimos a la visión de las marcas con respecto al futuro inminente de la eliminación de la intervención humana en un vehículo, al menos en algunas ocasiones y trayectos, cada marca vislumbra un futuro diferente de acuerdo a lo que imaginan que podrá ser la conducción autónoma.
Al final del día sabemos que podrán tener algunas diferencias, pero la solución básica es la misma: sistemas GPS de gran información con tiempo real de tránsito, rutas y situaciones; radares que determinen, en conjunto con el GPS, las condiciones exactas del camino a recorrer, y cámaras de visibilidad 360 que reemplacen a los ojos de un humano para integrar información a un cerebro central que procese y mande la señal para que el auto se conduzca con seguridad.
Sin embargo en marzo, el Grupo Volkswagen dejó ver imágenes conceptuales de su futurista Sedric, un vehículo autónomo que llevaría a los pasajeros a su destino con solo ingresar la dirección, y en el Auto Shanghái 2017, VW mostró una versión real de su concepto de vehículo autónomo: adiós cabina, espacio total para pasajeros y una movilidad de nivel 5.
El Grupo VW quiere que la conducción autónoma de Sedric sea tan simple que los pasajeros presionen un botón para ponerlo en marcha, y para ello se ha anunciado una asociación con la compañía desarrolladora de teléfonos inteligentes Mobvoi, que elaborará la interfaz de asistencia digital conectada a Sedric, así como a otros ejemplares desarrollados por VW.
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