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Desde que llegó a nuestro país la firma española SEAT, inyectada con toda la tecnología de VW a finales de 2001, se notaba que revolucionaría el mercado y como no, si de entrada lo...
Desde que llegó a nuestro país la firma española SEAT, inyectada con toda la tecnología de VW a finales de 2001, se notaba que revolucionaría el mercado y como no, si de entrada lo hizo incorporando un auto que jalaba todas las miradas por su diseño de HOT HATCHBACK, con faros delgados y finos con interiores en negro, todo el equipamiento de confort al interior, buena calidad en todos los sentidos y, sobre todo un motor 1.8T de 180hp con transmisión estándar de 6 velocidades. Así se presentaba el primer SEAT Leon Sport Turbo en nuestro país (aunque ya tenía varios años en España) y en ese entonces, todos quisimos uno. Aún recuerdo perfecto ese comercial de TV en donde aceleraba y al conductor se le escurría una lágrima por la velocidad…
Desde entonces, el SEAT León se volvió un mito en las calles llenas de autos que creían que tenían todo para correr uno contra otro, pero no calculaban que comenzaría el boom de los autos con motor 1.8 Turbo de VW, en este caso para SEAT. Cada vez que se veía un SEAT Leon Sport Turbo (en 2006 cambió denominación a FR), se admiraba y se sabía que era un auto capaz de revolcar a cualquiera y a muchos otros con cartas de presentación mucho más caras. Así se mantuvo a finales de 2001 y todo 2002, con discretos rines de 16 pulgadas, faros de halógeno con faros de niebla, quemacocos y hasta espejos retráctiles eléctricamente, que, para entonces, eran un hit. Después vino un cambio para el modelo 2003, en donde era el mismo auto, pero ahora con estribos laterales deportivos, rines de 17 pulgadas y distintas facias, mucho más deportivas. Esto fue la cereza en el pastel para que el mercado mexicano comenzara a pelearse estos autos en las concesionarias SEAT. Después llegó el máximo exponente, el CUPRA, que concretó el mito urbano: “Cuidado con los Leones Turbo y más con el CUPRA, que te destrozan, tengas el auto que tengas”.
Siempre he sido amante del SEAT León y he tenido varios ejemplares a través de los años, y déjenme decirles que este LEON FR DYNAMIC 2016, me ha dejado feliz. Han venido muchas mejoras y cambios a través de los años, pero sin perder el objetivo y respetando su linaje.
Monta un motor bastante eficiente, 1.8 Turbo desarrollando 180 caballos de fuerza, y son muy bien llevados con la transmisión DSG de 7 velocidades. Los más puristas queremos la transmisión estándar de 6, pero créanme que las paletas detrás del volante y los cambios rapidísimos, enamoran. Cuenta con 4 modos de manejo disponibles al alcance de un botón en la consola: ECO, NORMAL, SPORT e INDIVIDUAL, en donde los nombres son claramente indicadores del objetivo de ese modo y el INDIVIDUAL, es programable por el conductor. Estos modos modifican la eficiencia del motor, la dureza de la dirección, las relaciones de los cambios de la transmisión, entre otros. Es de resaltar que en modo ECO, se cuenta con modo de ‘rueda libre’ y es que cuando vamos en una pendiente, podemos dejar de acelerar y la transmisión suelta al motor para que se vaya en neutral y gaste menos combustible, automáticamente.
¡En modo SPORT, cambia hasta la iluminación interior de blanco a rojo y la respuesta del auto en general es excelente! Muy buen empuje del turbo, no se cansa y los cambios bruscos, verdaderamente exaltan. La dirección es exacta y lleva al auto a donde se le ponga. La suspensión no es modificable electrónicamente, pero está muy bien puesta a punto, debido a que tiene bastante confort para el uso diario y no duelen las calles mexicanas a pesar de sus rines de 18 pulgadas y llantas deportivas. Así mismo, tiene la firmeza necesaria para cumplir con todas nuestras metas deportivas, ya sea en pista o en carretera. Prácticamente no tiene rolling de carrocería el subviraje característico de los autos tracción delantera, aquí definitivamente no se ve. Es un auto muy bien logrado, con una gran plataforma y con balance en todos los sentidos. Así como se eleva rapidito el velocímetro y tacómetro, también puede frenarse fuerte y bajo control. Los frenos están en línea con las prestaciones del auto.
Por fuera, se nota de inmediato que se trata de un SEAT Leon diferente, gracias a los detalles distintivos, como es el labio frontal en color plata, bastante más grande que en otros años. El quemacocos es de gran tamaño y remata con el techo en color negro, dando una sensación de que todo el techo es de cristal. También, los rines “smoked” en tono gris bastante oscuro (color titanium, oficialmente) de 18 pulgadas, estribos y alerón trasero, bastante discretos en color negro y la iluminación en FULL LED, con luz diurna, altas y bajas, hacen que este FR DYNAMIC jale mirada tras mirada. Cuando se le vea el polvo, por detrás alcanzarán a ver la salida doble del escape, típica del FR (Sport Turbo inicialmente) con sus colillas, no sólo el tubo de escape.
Por dentro, los asientos tienen ajuste de altura y soporte lumbar. Están cubiertos en tela SPORT en su mayor parte y están envueltos por piel en las partes laterales rematando con las costuras en color rojo, también encontradas en la palanca y la bota del freno de mano. Desde luego, hoy en día no puede faltar la conectividad a todo lo que da, y el FR DYNAMIC no se iba a quedar atrás. Cuenta con una pantalla táctil de 6.5 pulgadas, en donde podemos controlar de todo, desde el radio, bluetooth, sistema de navegación, gráfica de sensores de proximidad y los famosos ‘modos de manejo’ (SEAT Drive Profile). El sistema de sonido es importante en cualquier auto Sport Coupé y SEAT Sound System, lo hace muy bien. Acepta CD, MP3, MP4, SD, etcétera. Si con eso no escuchan lo que quieren, merecen estar en MUTE.
Con todas las prestaciones deportivas, hay que pensar en la seguridad ante un accidente. Todo está cubierto con 6 bolsas de aire, ABS, ESC (Electronic Stability Control) sensor de presión de llantas y hasta sistema de Reconocimiento de Cansancio (el famoso ícono de la tazita de café, humeante) Para los que quieren que sus bebés sientan la deportividad de un FR desde sus etapas iniciales, está equipado con el sistema ISOFIX. Además, tiene el sistema Post – Collision Brake System, que como su nombre indica, ante cualquier choque, hace que el auto frene automáticamente, para evitar colisiones secundarias. Para evitar choques mucho más leves, tiene sensores de proximidad en facias delantera y trasera. ¡No hay pretexto para evitar recargones!
Está disponible en 3 colores: blanco, plata y rojo emoción. Su precio: 385 mil 300 pesos. Nada mal por todo lo que ofrece. Es un auto con buena calidad en todos los aspectos, que se puede usar diario sin problema, funciona muy bien para cualquier viaje y por supuesto, para cualquier aventura deportiva que se le ponga en frente. Tiene todo lo necesario y no le falta nada. Es un coche mundano, con precio aterrizado, con gran tecnología, prestaciones y seguridad. Es un deportivo, pero no uno incómodo. Llama la atención, pero no vamos aterrados en el semáforo. Es uno de esos autos que escuchamos decir “Yo con mi FR, ando feliz”, así de simple y llenador.
Sí, soy fan del SEAT León, pero honestamente, una vez que lo hayan manejado, ¿quién no lo será?
¡Felicidades por estos 15 años, SEAT México. ¡Seguro se vendrán otros 100!
