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Ciertos mitos en la industria automotriz nos han dejado pensando a través del tiempo.
Existen varios mitos sobre autos que han sido los más comunes y no han logrado borrarse con el paso de los años, aquí algunos de ellos.
Ciertos mitos en la industria automotriz nos han dejado pensando a través del tiempo, entre ellos: el color del auto, velocidad, tipo de gasolina que usas, incluso, el por qué de los colores de producción.
Aquí van 3 mitos que han sido los más comunes y no han logrado borrarse con el paso de los años.
Un popular mito de los más falsos. Los vehículos eléctricos entregan el torque de manera inmediata, a diferencia de un auto con motor de combustión que debe desarrollar las fuerzas conforme suben las revoluciones. Esto permite que la aceleración de un auto eléctrico sea prácticamente inmediata. Además, mantiene la velocidad de una manera más eficiente.
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Durante mucho tiempo este mito ha provocado que los fanáticos de la velocidad pongan gasolina premium a sus vehículos, y así –según ellos– conseguir mayor potencia en motor. La potencia del motor la determina la composición y construcción del mismo, no necesariamente por el octanaje del combustible. La diferencia real entre los compuestos de gasolina permiten que un tipo de combustible tenga una capacidad de compresión mayor. Esto permite que no haya pérdidas de potencia debido a pre-explosiones y que se desarrolle la capacidad total del motor, pero en ningún momento la potencia se incrementa.
Uno de los mitos más populares, dicen que si el auto es rojo el costo del seguro incrementa. Este mito dice que el costo depende directamente del color del vehículo. Sin embargo, este mito tiene su origen debido a que la mayoría de los adolescentes elegían el color rojo. En realidad, la edad era el motivo principal por el cual el costo del seguro incrementaba, pero no por el color.
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