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El paquete de baterías MEB forma el núcleo energético de la estación de carga.
Atrás han quedado los tiempos de usar combustibles fósiles para mover los autos. Volkswagen lo sabe y se ha enfocado a estudiar, diseñar y crear nuevas tecnologías para una movilidad 100% verde y ésta es sin duda la era eléctrica.
Es por eso que la alemana Volkswagen ofrece un vistazo de la estación de carga rápida móvil del futuro creada por la compañía. Ésta se puede configurar de forma flexible e independiente del suministro de energía en cualquier lugar que se necesite: por ejemplo, en estacionamientos públicos de la ciudad, en las instalaciones de la compañía, o como un punto de carga temporal en eventos de gran escala. La estación de carga móvil funciona conforme al principio de un banco de energía, algo que es familiar para muchas personas con teléfonos inteligentes, pero aplicado a los vehículos eléctricos.
La capacidad de carga hasta de 360 kWh permite abastecer hasta 15 vehículos eléctricos, incluyendo miembros de la nueva familia ID.1 de Volkswagen, que se pueden realizar en una operación independiente. Gracias a la rápida tecnología de carga, el proceso2 únicamente requiere 17 minutos en promedio. Si el contenido de energía del conjunto de baterías integrado es inferior al 20%, la estación de carga agotada simplemente se intercambia por una que esté cargada.
Sin embargo, si está acoplada permanentemente al suministro de energía hasta con 30 kW a través de una corriente alterna, el paquete de baterías se auto recarga constantemente. En caso de que el proceso de carga esté basado en el suministro de energía renovable, la estación de carga permite además el almacenamiento temporal de la energía generada en forma sustentable, tal como energía solar o eólica y, por lo mismo, ofrece una movilidad neutra en CO2.
