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Es así como los vehículos eléctricos pueden tener un papel fundamental en la respuesta a los desastres, como el que azotó a la región de Tohoku, Japón, hace cuatro años.
En el marco de la conferencia mundial de Naciones Unidas sobre la Reducción de Riesgo en Situaciones de Desastre, se ha puesto especial atención en las lecciones aprendidas de las más recientes crisis, y sobre los que se puede hacer para estar mejor preparados frente a lo inevitable.
A pocos días del cuarto aniversario del terremoto y posterior tsunami que azotó a Japón, el gobierno, líderes empresariales, ONGs y ciudadanos de todo el mundo, están intentando diseñar una estrategia a nivel mundial que permita reducir el riesgo en situaciones de desastre.
Es así como los vehículos eléctricos pueden tener un papel fundamental en la respuesta a los desastres, como el que azotó a la región de Tohoku, Japón, hace cuatro años.
Las mejores prácticas adoptadas en la Conferencia de las Naciones Unidas en Sendai esperan limitar el impacto de futuras catástrofes en comunidades en todo el mundo, salvando vidas y elevando el nivel de la capacidad de resistencia para todos.
