MENU
MENUMENU
MENU
Cualquier bloque, por pequeño que parezca tiene que contar con un rendimiento excepcional para ser considerado como uno de los mejores en su división
Cualquier bloque, por pequeño que parezca tiene que contar con un rendimiento excepcional para ser considerado como uno de los mejores en su división, sí, así como en el box, usted no va a poner a pelear a Mike Tyson con «El Terrible Morales» ¿o sí? Bueno, si el pay per view es lo suficientemente atractivo quizá lo haría, pero no sería lo apropiado puesto que el originario de Tijuana pega más rápido, o pegaba, pero Tyson puede sentarlo de un solo puñetazo o inclusive arrancarle la oreja.
Dejando de lado el comparativo deportivo, un motor de apenas 1 litro de desplazamiento entregará mucha potencia en promedio, pero si se le carga peso o se le exige ante una subida, notará una falta de «recursos» puesto que no está fabricado para empujar, sino para rendir y ser sumamente eficiente, y así lo consigue el ganador al motor del año 2014 en su desplazamiento, el tremendo: · 1.0L EcoBoost DOHC I-3, motorización que anima al Ford Fiesta.
Sus números no nos dejarán mentir, exhibe 123 caballos de potencia y 169 Nm a 2,500 giros, uff, tanto poder a tan pocas revoluciones, acoplado a una caja no muy galardonada, pero que hace el trabajo y empujará a su compacto sin problemas. La compresión llega a 10.0:1, lo que emula a los buenos motores deportivos, mientras que el bloque está fabricado en aluminio, lo cual resta peso y gana en –consecuencia– performance y dinamismo al ritmo de sus tres cilindros y un número de emisiones controladísimo: 32/45 mpg #MiércolesDeMotor.
