Estimados amigos, nuevamente tenemos un espacio para platicar de los mejores motores en la actualidad, pero qué sería si nos trasladáramos al pasado, digamos 51 años atrás y miráramos el surgimiento no solo de un motor de altas prestaciones, sino de una armadora automotriz de deportivos italianos, es decir: Lamborghini.
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Según expertos, el Miura es considerado el primer superdeportivo de la historia, pero ¿qué hay del primer bólido de Bologna, en prototipo? Entonces hablaríamos de el motor contaba con 12 cilindros en posición V para 3.5 litros con levas cuádruples. Quizás uno de los detalles más particulares en comparación con los automóviles de la época, era su suspensión trasera independiente, mientras que al igual que su antecesor, contaba con un cuerpo realizado por Carrozzeria Touring, Milán.
Poseedor de un motor V12 a 60º de 3,464 centímetros cúbicos, 24 válvulas, 6 carburadores Weber, suspensión independiente, frenos de disco en las cuatro ruedas, rines de 15 pulgadas, transmisión manual de 5 velocidades, potencia de 280 CV (a 6,500) y torque de 325 Nm (a 4, 500 rpm), conseguía entregar resultados de velocidad sumamente destacados para la época: 6,8 segundos en la prueba de aceleración (0 – 100 kmh) y 250 kilómetros por hora de velocidad tope.
Este corazón daba un 0-100 en 6.8 segundos, lo que para la época era una barbaridad, listo para competir con su eterno rival Ferrari. Lamborghini había nacido y con él una propuesta para la creciente demanda de automóviles deportivos ideales para competición. Quizá este aspecto jamás se haya desarrollado en Lambo para no competir con Ferrari en pista, pero vaya que le dan batalla en las calles. #MiércolesDeMotor.
Entusiasta de la comunicación y la actividad del periodismo ejercidos con profesionalismo. Manejo desde los 13 años, pero –en la actualidad– sigo jugando a los carritos.