Esta estrategia de publicidad es muy utilizada en el cine, el objetivo es hacerlo de manera sutil, que quede bien con la historia y el personaje.
Como buena cinéfila y mercadóloga siempre pongo atención en la forma que las marcas hacen product placement. Y más ahora que me encuentro en la parte automotriz, me fijo en los convenios que hacen las productoras con la industria automotriz.
Para quienes no estén familiarizados con el término, esto no es más que una técnica publicitaria en el que se promociona la marca de de forma poco intrusiva para el consumidor. Mostrando el logo o un producto de su oferta dentro del contexto de una película, serie, cortometraje, entre otros formatos.
Con respecto a la pantalla grande, muchos los podemos ver de manera orgánica y no nos damos cuenta porque queda bien con el personaje. Sin embargo, hay product placement demasiado forzados, que inmediatamente notas que es pura publicidad. Así que, para divertirme un poco he recopilado algunos mensajes publicitarios de autos que han funcionado bastante bien en diferentes cintas reconocidas.
Foto: excelenciasdelmotor.com
Cuando nombras una película con el nombre de un automóvil y te sales con la tuya, en sentido que no notas que es publicidad, eso es tener una excelente estrategia de marca detrás. En esta película de acción de 2008, Clint Eastwood es un viudo racista que ama a su Gran Torino 1972. Cuando Kowalski, su personaje, atrapa a un joven adolescente que intenta robar su preciado auto, trata de reformarlo y ayudarle de alguna manera. Una historia bastante interesante, con la marca Ford saliendo casi todo el tiempo en la pantalla sin verse invasivo.
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Podríamos hablar de diferentes autos que han sido “protagonistas” del cine, pero no pararíamos con la lista. Así que incluyo esta “máquina del tiempo”, un DeLorean que obviamente en todo tiempo se está mencionando su nombre sin caer en lo comercial. Pues hace que el espectador realmente crea que este vehículo fue construido para viajar en el tiempo. Funcionó porque el coche es único, y no se puede hacer con otro tipo de modelo.
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Creo que no podemos pensar en Iron Man sin pensar en un Audi. Siendo Tony Stark un personaje de dinero y estilo, la marca de los cuatro aros encaja a la perfección. Esta es una relación de marketing que parece tener todo el sentido del mundo. Y aunque tuvo otra gama de vehículos deportivos lujosos, en la primer película de este superhéroe nadie notó este tipo de publicidad.
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Seguimos con Audi, quién se fusiona perfecto con Will Smith en esta cinta de I.A. Siendo un concept car creado especialmente para la película, que se podía conducir de manera autónoma y contaba con el diseño de la parrilla de la firma alemana en la parte delantera.
Claro, es un diseño muy futurista, pero en comparación con algunos fantásticos autos de película, el RSQ realmente se parece a otros productos de Audi. «No pagamos en efectivo para obtener colocaciones de productos. Suministramos uno o varios coches para el rodaje real y, si es necesario, ofrecemos asistencia técnica y logística al equipo de producción”, comentó en una entrevista del 2004 el jefe de colocación de productos de Audi, Tim Miksche.
Foto: Audi
Es algo lógico que veamos a James Bond, un agente secreto británico, conduciendo un Aston Martin. Así que para Casino Royale, el actor Daniel Craig se puso al volante de un DBS, que en realidad no se había revelado cuando se lanzó la película. Más recientemente, para Specter, Aston le otorgó a Bond un DB10, un auto que existe solo en el mundo del cine pero con una vista previa del DB11.
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