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Conversamos con los pilotos Daniel Ricciardo del equipo Infiniti Red Bull Racing y Carlos Sainz de la escudería Toro Rosso sobre el futuro de la máxima categoría. Esto fue lo que nos compartieron.
Estamos casi al final de la temporada de la Fórmula 1 y, a pesar del bestial dominio de Mercedes-Benz, hemos vivido algunas carreras muy emocionantes, sin embargo, aún sentimos que el Gran Circo nos ha quedado a deber algo más allá que el rabioso sonido de un motor, que actualmente suena como el ronroneo de un tierno gatito. La pregunta es ¿Hacia dónde se dirige la categoría reina del automovilismo, estamos condenados a un serial de mucha tecnología y poca adrenalina?
Para responder nadie mejor que las jóvenes promesas de la F1, el australiano Daniel Ricciardo, del equipo Infiniti Red Bull Racing y Carlos Sainz de la escudería Toro Rosso, quienes en su reciente visita a nuestro país hablaron de sus perspectivas acerca de esta nueva era del deporte motor.
“Creo que esta Fórmula 1 no está mal, pero siento que hace falta más potencia en los autos, además de que seguimos extrañando el ruido de los motores, eso ha sido un factor que los fanáticos siguen pidiendo. como piloto siempre buscarás ir al límite, por lo que es necesario volver un poco a las raíces del deporte, sin olvidar que es importante el desarrollo tecnológico. Debe haber balance”, destacó Ricciardo.
Por su parte Carlos Sainz explicó que “Este es un cambio que tenía que llevarse a cabo, era lógico, pero también siento que se nos pasó la mano le quitamos la magia a la categoría con la reducción del sonido.
Este paso es el correcto para ser más amigables con el medio ambiente y seguir innovando en materia de tecnología.”
Aún le restan 10 fechas al calendario de la máxima categoría y, seamos honestos, no habrá quién le haga sombra a los bólidos de Mercedes-Benz quienes no han tenido un ápice de piedad al momento de pisar el acelerador a fondo dejando a sus rivales mordiendo el polvo con cada vez más segundos de diferencia.
En cuanto al espectáculo se refiere habrá que ser pacientes, para ver a una Fórmula 1 revolucionada en la que exista un equilibrio entre tecnología y velocidad, la cual no se cruce en el arrojo y calidad de manos que ha distinguido a la categoría reina en su historia. Somos testigos de la evolución del deporte que nos apasiona y por ese motivo somos afortunados.
