El cuerpo humano no está diseñado para pasar largos períodos de tiempo sentado. Hacer exactamente eso es exactamente lo que implica conducir.
Estoy escribiendo este artículo por experiencia propia, no solo porque sé que tengo que ser más consciente de mi postura cuando ando de pie o sentada. Sino porque, ya llevo tiempo con un dolor específico en la espalda y pensé que en parte era el asiento del auto. Y en realidad, no es la causa principal, sin embargo puede agravar el problema de espalda.
Los expertos nunca van a culpar a los fabricantes de autos, más bien, van a pedir que nos miremos al espejo y observemos nuestra postura y cómo acomodamos nuestro asiento. Ya que problema radica, en que muchos de nosotros tenemos demasiada prisa de subirnos al auto, sin tomarnos el tiempo necesario para mover el asiento y el volante para que nos permitan tener una mejor postura.
A pesar de ello, no podemos quitarles toda la culpa a los fabricantes de los asientos de los autos, pues también éstos, están diseñados para la persona promedio. Y no todos somos de la misma forma y tamaño. Según, el portal telegraph.co.uk, se llevó a cabo una investigación a mediados de los noventa sobre el efecto que tiene conducir en nuestra espalda.
Aunque hay algunos conductores de autos han identificado y resuelto este problema, con apoyos aparte de los asientos. Sin embargo, las marcas han incorporado algunas ayudas pero en interiores de lujo. El problema es que no debe estar segmentado a ciertos modelos de alta gama y claro que las armadoras lo pueden hacer mejor.
Mientras tanto, debemos configurar nuestro automóvil para que sea cómodo y podamos tener una mejor postura. El cuerpo humano no está diseñado para pasar largos períodos de tiempo sentado. Hacer exactamente eso es exactamente lo que implica conducir.
Foto: blog.racc.es //Foto de portada: backonsite.com