Cuando compramos un auto, comúnmente nos dejamos llevar por el color que más nos conviene, por ejemplo, el que menos se devalúa o el que más nos gusta.
Para quienes prefieren los autos color negro o blanco, seguramente saben lo que esto significa: limpieza difícil.
Sin embargo, muchos elegimos pagar el precio con tal de estar felices, ¿a poco no? Finalmente, el negro simboliza elegancia y status. Además, si el auto está limpio y recién encerado, tendrá unbrillo especial. ¡Y vaya que llamará la atención!
Por su parte, el blanco evoca limpieza y estatus. Su limpieza es mucho menos rigurosa que el negro. Aunque esconde mejor la suciedad, no lo hace tanto como los colores neutros.
Pero, si ya estás cansado de invertir tiempo y dinero en lavar tu auto, y deseas que esté más presentable en temporada de lluvia sin que implique tanto trabajo, es momento de pensar en colores más amables.
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Quizá sean los que te parezcan los más aburridos, tal es el caso del champaña, beige, color topo, café claro y gris. Evidentemente, el polvo, el lodo y la suciedad se notarán poco.
Pero, como todo, hay un precio a pagar. El auto pudiera parecer que proyecta una imagen demasiado sobria y aburrida. Es decir, no tiene la presencia y el estatus de un auto negro, por ejemplo.
Por esta razón, el color más vendido y popular son los tonos grises y plateados. Al igual que el blanco y el negro, no se devalúan.
Y, lo mejor de todo, un plata o un gris es de fácil limpieza y mantenimiento, conserva la temperatura estable y tiene buen valor de reventa.
Con este color, no tienes que preocuparte mucho por la imagen que el auto proyecta de ti, puesto que representa sofisticación y seriedad.
Sin embargo, ten en mente que el color plata es todavía mejor que el gris. Tiene mayor brillo, es más vistoso y disimula más el polvo.
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El azul metálico y los colores oscuros tienen las características de limpieza del negro, pero a un grado un poco menor.
Aunque el rojo es más llamativo y deportivo, es más fácil de mantener que los colores negros y oscuros en general.
Los colores vinos y borgoña requieren de muchos cuidados, tal como el resto de los tonos oscuros.
Por último, los colores azules y verdes claros son de fácil limpieza y mantenimiento. Pero, como te imaginarás, pueden pasar de moda y verse afectados por su valor de reventa.
Y tú qué prefieres, ¿un auto que se ensucie poco o que proyecte una imagen poderosa?
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