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Además será súper personalizado, tal como tu celular...
El auto podría ya no ser el medio, sino el fin en sí mismo. Por lo menos ésa es una de las reflexiones que nos ha dejado el Consumer Electronics Show, CES 2021.
La transformación de la industria automotriz hacia una movilidad inteligente no implica únicamente vehículos sin conductor o autos eléctricos. También entraremos a una nueva era de personalización, donde el contenido será de los puntos centrales de la experiencia.
Por lo mismo, en el evento digital más grande tecnología, se llevó a cabo la conferencia «Vehicle Tech Innovations Consumers Want» (Innovaciones tecnológicas para vehículos que desean los consumidores). Esta plática contó con la presencia de Carla Bailo, Presidente y CEO del Center for Automotive Research; Stefan Buerkle, Vicepresidente sénior, Ventas, Computación de dominios cruzados de Robert Bosch LLC; Andrew Poliak, CTO de Panasonic Automotive; y Christiane Zorn, Director sénior de marketing de productos de AUDI AG.
A continuación, te compartimos el análisis de los expertos que nos permiten conocer lo que viene en cuanto a la experiencia dentro del auto.
Principalmente, hay poca confianza en transporte público y en el carsharing. De la misma manera, ha puesto sobre la mesa el pensar más en los materiales y la sanitización. Las personas esperan las experiencias contactless, o sin contacto, y tener que pagar en un solo lugar, integrado, sin tener que estar abriendo muchas apps para acceder a servicios. De la misma manera, las personas han cambiado a bicicletas, tenencias que no va a cambiar.
La tecnología sin contacto incluye el abrir los autos sin llave, los cual va en aumento por la pandemia. Además de los filtros de limpieza del aire, también ahora se deberá priorizar cómo los autos se convierten en espacios más completos y privados, con entretenimiento, internet, pantallas, etc.
A su vez, ha destacado el rol de los autos autónomos en la infraestructura y ciudades inteligentes. Los autos requieren muchos datos y ahí es donde entra la infraestructura. Por eso están haciendo pruebas en zonas donde hay sensores y donde las personas ya no deban estacionar sus autos, etc. El tener menos estacionamientos y tráfico te permite usar los espacios de otra manera. Por igual, se puede mejorar el tránsito cuando los autos se comuniquen con semáforos. Las posibilidades son infinitas una vez que se optimiza con tecnologías.
Covid va a cambiar los patrones de desplazamiento para siempre. El 90% dice que no va a volver a la oficina como lo hacía antes y sólo un 20% podría contemplar a tiempo completo. Esto cambia las oportunidades de las ciudades para usarlas diferente. Por eso el estacionamiento va a ser un gran cambio, porque 20% del tráfico viene de personas buscando espacios dónde estacionarse. Si hay más espacios verdes, esto va a traer inversión y más personas querrán vivir allí. Por ello, es importante no revertir estas tendencias. En Europa también están buscando hacer un nuevo uso de los espacios, conducir menos y trabajar más desde casa.
El 25% de las personas que compran un auto casi no lo usan, pero se fijan en la navegación y conectividad. El auto es un instrumento social, y es usado para el ocio. Ahora con la pandemia, el auto se está convirtiendo también en una oficina, gracias al silencio y la iluminación que ofrece. Pero, la gente usará el auto para actividades más sociales, porque lo laboral se manejará más a distancia.
Sonido premium, conectividad, calidad en pantallas, etc, ahora se trata del contenido. Los autos están ofreciendo cosas que ni siquiera se tiene en los hogares, con bocinas, visuales y la posibilidad de ver películas como en el cine.
Esto conlleva a que la complejidad sea mayor, porque se requieren de muchos más sensores que un avión para ofrecer seguridad y manejar todos estos datos. En los últimos diez años se han integrado sensores, monitores, etc. En el futuro, más que seguir añadiendo, se tratará de darles un nuevo sentido, como el que detecten cómo te sientes. La clave estará en cómo conjugar todos los datos, incluyendo los provenientes de las cámaras, para nuevos servicios. Las posibilidades son infinitas.
Lo legislativo es un reto, por la privacidad de datos, por ejemplo, en el uso de las cámaras. Por ello, la importancia radica la confianza de la gente, lo cual no se da naturalmente, se gana. ¿Cómo? Por ejemplo, si les ofreces algo que quizá no consideraban, pero les facilita la vida y los hace sentir bien.
Es importante estandarizar para tener la confianza en el manejo de los datos de las personas. Empezar a usar el mismo lenguaje con todos y no el que cada marca use su propio nombre o término porque confunde, y la gente piensa que el auto ya es autónomo, cuando aún debe de estar al pendiente de la conducción. Hay sistemas que pueden tomar el control si ve que la persona está distraída, pero eso toca temas sensibles de datos. Justamente por eso se debe de poner sobre la mesa esta conversación, con respecto cómo ser más seguros.
La educación es clave, pero muy difícil de lograr en todos los niveles, hasta en concesionarios. Como industria y socios de OEM (Original Equipment Manufacturer o fabricantes de equipo original) deben involucrarse en cómo llamar la atención del conductor para que mantenga la atención en la conducción. Ofrecer soluciones múltiples, porque no sirve, por ejemplo, que vibre el volante, si el conductor no tiene siquiera las manos puestas en él o está volteado.
Un punto importante será el que los autos ofrezcan experiencias a distintos consumidores. Que sea un dispositivo personal, como el celular, porque no todos quieren lo mismo. Esto tiene su complejidad por la diversidad cultural, pero, a diferencia de antes, ahora el software permite contextualizar. Seguirá siendo el mismo software o plataforma, pero se regionaliza o se acerca a lo que la persona quiere. Ahora la personalización es más flexible.
Incluso cuando se vende el auto, todavía puedes actualizarlo y hacerlo tuyo. Aunque, muchas veces, el comprador tendrá las elecciones del dueño anterior. Por otro lado, en cuestión de equipo, el reto será que esté vigente en diez años, y ni hablar de los 15 o 30 años de vida. Podríamos compararlo con el celular, el cual se cambia cada determinado tiempo porque ya no es compatible con las actualizaciones.
Por último, la tecnología se tiene que experimentar para saber lo que se quiere. La actualización permite probar tecnologías por dos meses y, si te gusta, comprarla. E incluso, permitirá desactivar funciones.
¿Qué te parece?
#elfuturodelautoeshoy
