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Una alternativa inusual a la H1 de Hummer.
Durante la época de los noventas, existió una fiebre importante por los vehículos de ascendencia militar iniciados por la famosa Hummer H1. Sin embargo, Toyota Mega Cruiser resaltó en esa misma época como una alternativa inusual al vehículo militar. Y con el paso de los años, ha pasado a ser un objeto de colección. Se trata del vehículo de tracción a las 4 ruedas más grande jamás hecho por la marca asiática.
A pesar de no ser un vehículo de lujo como tal, Toyota Mega Cruiser se vendió de esa manera. El coche solamente estaba disponible mediante tiendas de Toyota selectas en Japón. Originalmente diseñado para el ejército japonés como medio de transporte, el vehículo eventualmente evolucionó para introducirse en las fuerzas policíacas, de bomberos y eventualmente como vehículo civil.
El primer prototipo de esta SUV se presentó al público en la edición 30 del Tokio Motor Show en 1993. Le tomó al fabricante asiático dos años para comenzar su proceso de producción. Ensamblado por Gifu Auto Body, el coche destacó inmediatamente por su longitud de poco más de 5 metros y un ancho de 2.17 metros. Su peso total era de hasta 2,850 kilogramos.
Toyota Mega Cruiser se diseñó como si fuera una SUV de cuatro puertas. Sin embargo, en cuanto a mecánica y capacidades quedaba claro que el coche era especial. Toyota montó un motor 4.1 litros turbo diesel de 4 cilindros en línea. Especialmente diseñado para este modelo, erogaba 153 caballos de fuerza y 282 libras pie de torque acoplado a una transmisión automática de 4 velocidades.
Además de 4WD, la camioneta utilizaba un sistema de dirección a las cuatro ruedas para óptimo control en los caminos más complicados. Esto fue porque Mega Cruiser se planteó como un vehículo de prueba para renovar el segmento SUV utilitario después de que Land Cruiser tuvo problemas en cuanto a ventas.
Debido a su rareza, Toyota Mega Cruiser se considera como un coche de colección sobre todo para los mercados fuera de Japón. La marca asiática produjo 3,000 ejemplares de este vehículo, originalmente destinados para propósitos militares de transporte de equipo y unidades así como para cargar misiles.
No obstante, Toyota produjo la versión civil conocida como BXD20. Menos de 150 unidades se produjeron destinadas a este mercado, por lo tanto, se trata de uno de los modelos más extraños en la historia de Toyota. Tanto así que un ejemplar usado se vendió en subasta por hasta 310,000 dólares. Una cifra más que impresionante para una de las SUV’s más exóticas en la historia.
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