O deberíamos decir, ¿la reina? Así es, la multicampeona de las Superbikes de producción de la marca japonesa resurge y se renueva para dar paso a una de las motocicletas más emblemáticas de su generación.
Tras 30 años de ser el referente en las motocicletas de alta cilindrada, siendo una de las más ganadoras en los campeonatos de motocicletas desde stock hasta resistencia alrededor del mundo, y con la nueva incursión de la marca dentro del campeonato mundial de MotoGP, Suzuki apuesta por traer a México su nueva GSXR 1000, ahora con una dos versiones: A y R, con toda la genética de competencia por dentro.
Los representantes de la marca en México no escatimaron en su presentación el día de ayer en el Autódromo de los Hermanos Rodríguez, haciendo una exhibición plena de la deportividad de esta moto, en un lugar ideal para mostrarla: la pista. Adicional a ésta, se presentó la no menos espectacular Suzuki GSX-S 750, una naked de corte deportivo, con el corazón de la GSXR-750, que pinta para ser una gran opción en esta categoría cada vez más popular entre los usuarios que buscan la potencia de una moto de pista, pero con un manejo más adaptado a la ciudad y carretera, sin sacrificar potencia y desempeño. Por último, también hubo novedades para la baja cilindrada, con el anuncio de la introducción a México de la nueva Suzuki GSXR-150, una pequeña supersport con toda la esencia de las versiones R de sus hermanas mayores de la gama.
“The King is back”, la frase que usó Suzuki para anunciar la sexta generación de su GSXR-1000 no puede ser más acertada: 202 Kgs por 202 hp de potencia, Quick Shifter, suspensiones especiales, ABS con asistente de rastreo de frenos, discos y calipers Brembo, tres diferentes configuraciones de potencia, diez niveles de asistencia de control de tracción en ambas versiones y esto solo para empezar.
El objetivo es muy claro: recuperar el título de el “Rey de las motocicletas deportivas”. Suzuki apuesta por lograrlo y a continuación les ofrecemos algunos datos que pudimos obtener de las minuciosas y muy bien explicadas características técnicas de la nueva moto de la casa de Hamamatsu que nos proporcionaron ayer durante su presentación.
Motor: El más potente hasta el momento de Suzuki, limpio y fácil de elevar a altas revoluciones pero sin sacrificar en bajas. Eficiente, resistente y con tecnología derivada de MotoGP. Cuatro cilindros de encendido uniforme, un sistema de distribución variable de válvulas Suzuki Racing VVT , nuevos cuerpos de aceleración Suzuki-Top Feed Injectors (S-TFi «Ride-by-wire») que culminan en un escape de titanio que combinado Suzuki Exhaust Tuning-Alpha (un eficiente sistema de válvulas de mariposa en los headers) conforman el sistema amplio de potencia que deriva en 202 caballos de fuerza.
Chasis: De aluminio, más compacto, optimizado para lo mas importante y básico: acelerar, girar y detenerse. El más aerodinámico de la historia de la marca, con un carenado elegante y estrecho, desarrollado en el túnel de viento y con fuerte influencia de la GSXR-R del mundial de velocidad. Ductos de aire S-RAD mas amplios gracias al nuevo diseño del faro delantero. Reducción de peso y medidas con el objetivo de una mayor maniobrabilidad y agilidad, logrando 202 kg en total.
Electrónica: Control de tracción con rastreo de movimientos inerciales IMU derivado de MotoGP, S-DMS -Drive Mode Selector- con distintas variantes para pista, carretera, calle y lluvia. Sistema de frenos con rastreo de movimientos, launch control y quick shifter –cambios ascendentes y descendentes sin utilizar el clutch- (versión R), botón de encendido, sensores de control de marcha, velocidad, aceleración (ECM), rueda trasera y delantera, por mencionar algunos.
Suspensiones y frenos: Ambas versiones nos ofrecen horquillas Showa y shock trasero de la misma marca, totalmente ajustables. Pero para la versión R, se reservó lo mejor en estos componentes, con las variantes Balance Free Front y Balance Free Lite. En el apartado de frenos, ambas versiones equipan discos de pétalo de 320 mm y calipers Brembo, con un cilindro maestro de bomba radial de 19mm.
Además de estos tres apartados, la nueva Suzuki GSXR 1000 se distingue por su nuevo faro delantero LED mas compacto con luces de posición incorporados al carenado. Luces de stop también LED pero con un diseño vertical que ayuda a una notable reducción en el diseño del colín y portaplacas.
Sensaciones:
Gracias a la oportunidad que tuvimos de probar las nuevas motocicletas de Suzuki en el trazado corto del Autódromo Hermanos Rodríguez, pudimos obtener las siguientes impresiones de nuestro piloto de pruebas:
“La GSXR-1000 es una moto concebida para pista, prácticamente se la devora en cada metro que recorres. Al subirte lo primero que llama la atención es su tablero completamente digital y que puedes encenderla con un solo botón. El motor se escucha robusto, diferente al anterior, el tanque esta diseñado para que puedas posicionarte mejor, muy cómodo y más bajo, algo que se agradece en las curvas cuando tienes que afianzarte con las piernas o en las rectas cuando tienes que ocultarte para disminuir la resistencia del viento. Se maneja increíblemente bien, como si ya la conocieras desde antes, pero no puedes confiarte mucho porque la respuesta al recorrido del acelerador es muy contundente. Ágil, con una frenada firme y segura, entra dócil a las curvas y se mantiene con un excelente y estable paso por curva. Su aceleración es impresionante, y eso que no utilizamos todo el gas, porque tiene muchísimo potencial, pero más que probar su velocidad, queríamos sentir sus demás cualidades. En la versión A se sentía un poco más nerviosa al entrar a las curvas a alta velocidad, pero en la versión R, esas sensaciones desaparecían debido a la mejoría en las suspensiones y el quickshifter, que hizo que no nos preocupáramos por los cambios aun con la moto inclinada. En cuanto a la frenada, los impresionantes calipers y disco Brembo transmitían ese poder a la maneta, que aunque ajustada para calle nos dio una respuesta inmediata, prácticamente con un toque, la moto reducía drásticamente su velocidad pero sin perder adherencia.
En resumen es una motocicleta sumamente divertida, con la que puedes adueñarte de la pista, pero también de las carreteras, de preferencia las que tengas muchas curvas, incluso las complicadas. Ambas versiones requieren un nivel de conocimiento ya predeterminado para disfrutarlas al máximo, pero eso no limita a los pilotos que quieran incursionar por primera vez en su manejo, por que es noble y te perdona errores, además que, con sus cambios de tipo de manejo, puedes gestionar el no tener toda su potencia en el manillar, más el control de tracción que ayuda mucho a corregir si te estás pasando del límite, entre otros aditamentos. Sin duda será una moto que dará mucho de que hablar este 2018 y apunta a ser una de las mejores de esta generación.”
Precios y colores.
Ambas versiones ya están disponibles en piso de venta a partir de su presentación, y como lo dijimos antes, existirán dos versiones en desempeño y una variación de color:
Kia K4 sedán, el vehículo que se produce en México, fue nombrado uno de los…
Cuando la corporación General Motors pensó en desarrollar un nuevo HUMMER, a la vez que…
Encontrando la fuente de inspiración en los autos de TCR World Tour, Hyundai lanza el…
Esta semana toca el turno al resurgimiento del auto show de Los Ángeles, históricamente en…
Mercedes-Benz introduce a México la icónica Clase G 580 equipada con tecnología EQ, EDITION ONE,…