Conoce a uno de los sedanes de 4 puertas británico más famoso en la historia.
Si hablamos de sedanes clásicos con personalidad inigualable, Jaguar S-Type tiene que estar dentro de la conversación. Este ejemplar fue fundamental para consolidar a la marca dentro del segmento de lujo de los sedanes de 4 puertas, así como para crear una de las siluetas más distintivas del fabricante británico.
Dividido en dos generaciones y en etapas completamente distintas, la evolución del S-Type se notó principalmente en sus aspectos tecnológicos. Porque en cuento a su diseño, el coche siempre preservó su estética tipo retro que cautivó a los entusiastas. Si querías un coche moderno pero con una silueta clásica, difícilmente podías encontrar una mejor opción.
La historia de Jaguar S-Type comienza en 1959 cuando el modelo Mark 2 se introdujo al mercado. Originalmente adaptado con el primer motor de seis cilindros en la historia de la marca, la idea original de Jaguar sobre este coche cambió radicalmente cuando se decidió desarrollar una versión independiente enfocada al segmento del lujo.
El resultado fue el S-Type que debutó con el mismo motor de 6 cilindros de 3.4 litros acoplado a una caja de 4 velocidades manual o una automática como opción de 3 relaciones. Utilizaba una suspensión más pequeña que la versión Mark X e implemento cambios estéticos mínimos al coche para su distinción.
A pesar de que el vehículo tenía 152 kilogramos más que la versión Mark 2, S-Type destacó por cambios notables en su sistema de dirección así como resortes nuevos para mejorar la experiencia de manejo. Su suspensión trasera independiente sería tan exitosa que la marca la continuaría utilizando en sus modelos hasta el año de 1980.
Al interior podíamos ver una consola hecha en chapa de nogal belga cubierta en insertos de vinilo negro. Nuevos controles se adaptaron para mejorar el sistema de ventilación y se mejoró la comodidad así como el espacio al interior. Se produjeron en total 24,993 unidades del coche hasta su eventual retiro en 1968.
Jaguar S-Type no volvería a la oferta de la marca inglesa sino hasta 1998 cuando se presentó en el Auto Show de Birmingham. Lo primero que destacó de esta iteración fue su clara inspiración en cuanto a estética del modelo original. El coche nació de la plataforma Jaguar DEW compartida con el Lincoln LS y el Ford Thunderbird.
La idea de S-Type era competir principalmente con vehículos como el BMW Serie 5 en el mercado de lujo. Para ello, la oferta de motor empezó con un V6 de 2.5 litros escalando hasta un V8 de 4.2 litros súper-cargado. En su configuración más potente, el coche producía 400 caballos de potencia y aceleraba de 0-100 kilómetros por hora en aproximadamente 5.3 segundos con una velocidad máxima de 250 kilómetros por hora.
El coche obtuvo un facelift mínimo en el año 2004, adaptando nuevos faros delanteros y traseros; una parrilla modificada y un capó en aluminio. Además, se añadió la oferta de un motor diesel de 2.7 litros con 207 caballos de potencia.
El Jaguar S-Type fue celebrado internacionalmente por su manejo súper cómodo gracias a su suspensión. En particular, el V6 de 2.7 litros ofrecido en las versiones de entrada fue calificado como la mejor opción al cliente gracias a su sorprendente economía de combustible.
El coche partiría eventualmente de la línea de producción en 2007 con un total de 291,386 modelos producidos. Consolidándose como uno de los modelos más populares en la historia del fabricante británico, S-Type es sin duda uno de los mejores homenajes al estilo de los 60 pero con un manejo y tecnología modernos.
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