“Vamos a dar forma a la movilidad individual y a nuestra empresa para cumplir con los más estrictos requisitos de sustentabilidad”
En la pasada Junta General de Accionistas de AUDI AG la compañía presentó su Informe de Responsabilidad Corporativa 2012, en el que se da cuenta de los objetivos y actividades en el campo de la sustentabilidad. Audi también se propone conseguir un papel de liderazgo en este terreno. La empresa asume su responsabilidad en cinco áreas clave: producto, medio ambiente, empleados, sociedad y operaciones comerciales.
“Vamos a dar forma a la movilidad individual y a nuestra empresa para cumplir con los más estrictos requisitos de sustentabilidad”, dijo Rupert Stadler, presidente del Consejo de Dirección de AUDI AG. La sustentabilidad en los procesos y en los productos está firmemente establecida como objetivo fundamental en Audi. “Estamos convencidos de que sólo lograremos un éxito sostenido como resultado de acciones responsables”, dijo Peter F. Tropschuh, director de Responsabilidad Corporativa de AUDI AG.
Audi ha preparado su programa de responsabilidad corporativa después de un intercambio de opiniones con grupos de interés y con los empleados. Este hecho queda claramente reflejado en el informe de sustentabilidad:
Producto
El compromiso de Audi con la responsabilidad corporativa se centra en su actividad principal. Por ejemplo, el lema `Vorsprung durch Technik’ se aplica sobre todo a la sustentabilidad de los productos. Audi tiene el objetivo a largo plazo de conseguir una movilidad neutral en lo que se refiere a CO2. El objetivo primordial en el campo del desarrollo de producto es reducir cada vez más las emisiones de dióxido de carbono. Cada nuevo modelo debe tener un consumo de combustible significativamente menor que su antecesor, lo que también significa emisiones más bajas de CO2. Actualmente, Audi ya dispone de más de 110 versiones de sus modelos que emiten menos de 140 gramos por kilómetro de dióxido de carbono y más de 40 por debajo de los 120 gramos por kilómetro.
La compañía da prioridad a un enfoque global: Audi analiza el impacto medioambiental de sus productos durante el ciclo de vida completo, desde la producción de materias primas para la fabricación, hasta la conducción y el reciclaje final. Con su certificación de impacto medioambiental Audi demostrará las mejoras en cada nuevo modelo respecto a sus predecesores.
La cadena de suministro de combustible es también relevante para un análisis global: Audi está siendo pionera en trabajar sobre el desarrollo de combustibles regenerativos que sean neutrales en su influencia sobre el clima. En este momento, la marca premium está poniendo en funcionamiento la primera planta del mundo a escala industrial para producir gas, instalaciones ubicadas en Werlte, en la región alemana de Emsland. En esta planta Audi utilizará dióxido de carbono y electricidad regenerativa para producir e-gas, preferiblemente a partir de los excedentes de energía eólica. Este metano sintético puede ser conectado directamente a la red de gas natural y suministrado a través de las estaciones de servicio de este producto, para servir de combustible al nuevo Audi A3 Sportback
g-tron, por ejemplo. La conducción con un Audi de e-gas está cerca de ser neutral para el medio ambiente, porque el CO2 liberado durante la conducción ha sido asimilado previamente de la atmósfera en la producción del e-gas.
Medio ambiente
El enfoque integral también incluye metas ambiciosas en el campo de la protección medioambiental de todo el Grupo. Paso a paso, el proceso de fabricación debe convertirse en neutral desde el punto de vista del CO2 y libre de aguas residuales. En las instalaciones de Alemania, Audi alcanzó en 2012 un objetivo que estaba previsto para el año 2020: reducir 30 por ciento las emisiones de dióxido de carbono por cada vehículo producido, en comparación con 1990. El objetivo ahora es reducir las emisiones otro 40 por ciento en 2020 con relación a 2010.
La producción de Audi en su planta principal de Ingolstadt ya es 70 por ciento neutral en emisiones de dióxido de carbono. Desde principios del año pasado, el ciento por ciento de la electricidad que utiliza la planta es conseguida a partir de fuentes regenerativas, lo que supone un hito importante en el camino hacia la producción neutral de CO2. Las emisiones de dióxido de carbono en Ingolstadt están disminuyendo y se sitúan en 290,000 toneladas anuales. La electricidad proveniente de fuentes regenerativas se utiliza en toda la fábrica, no sólo en la producción de modelos determinados.
La protección medioambiental tiene una larga tradición en Audi. En 1995 Audi fue la primera marca premium en recibir el certificado EMAS de la Unión Europea por su excepcional protección del medio ambiente