KIA nos confirma por qué vende millones de auto anualmente y a nivel mundial, y particularmente en México
KIA nos confirma por qué vende millones de auto anualmente y a nivel mundial, y particularmente en México, por qué en tan poco tiempo se ha convertido en una de las marcas favoritas de los consumidores, desplazando a propios y extraños. La clave: innovación y nuevos productos.
Es así que dentro del marco del Auto Show de Nueva York 2018, KIA nos presenta la segunda generación de su buque insignia: K900. Desconocido en nuestro país para muchos, confieso que alguna vez, justo antes de que llegara la marca coreana a México, vi uno rodando en calles de la CDMX. No se comercializa en nuestro país, pero si en EUA desde principios de esta década.
Es importante conocerlo ya que en este tipo de vehículos de super lujo y que representan un símbolo para la marca, es en donde veremos plasmados todos los avances tecnológicos de la marca, tendencias de diseño, percepción de lujo y confort, entre otros.
En este caso, K900 (segunda generación) nos presume líneas muy seductoras al exterior, exaltando el lujo de un sedán grande y que compite con los mayores de las marcas germanas y estadunidenses. Detalles en aluminio combinado con cromo, hacen que el auto resalte de inmediato y la firma de la marca esté presente: la parrilla tipo nariz de tigre. La firma lumínica de la luz diurna de faros remata todo el estilo refinado y lujoso de este K900.
Interiores a la altura
Al interior, se desborda la calidad en los interiores y la sensación de confort pleno. Para eso están hechos estos autos. Los asientos son plenamente cómodos y ergonómicos y en muchas partes de puertas, volante y consola central, se combinan perfectamente con insertos en madera con la beta expuesta. La piel Nappa Premium presume perforado, pero sobre todo, costuras en tonos más claros para acentuar el lujo de cada puntada.
Destaca mucho la pantalla central en el tablero como una de las más grandes en el mercado con 12.3 pulgadas. Desde luego, desde esta se controla todo, pero también desde el controlador de asientos traseros. Como buen auto insignia super lujoso, está pensado para quien viaja en el asiento trasero con chofer, así que del asiento trasero emerge una pequeña consola con todos los controles necesarios para cumplir sus deseos.
Desde luego, cuenta con un sistema de sonido a la altura de los estándares mundiales: 17 bocinas harán lo propio para impulsar la potencia del sistema de sonido Harman Kardon/Lexicon.
La luz ambiental puede ser programada en 7 diferentes tonos y todo el techo y postes interiores complementan el habitáculo al estar forrados en Alcántara de gran calidad.
Debajo del capó se esconde un poderoso tren motriz derivado del hermano deportivo KIA Stinger: V6 3.3L Biturbo con 365 hp y 376 libras pie de torque. Además, enfocado en confort y buen consumo de combustible, presume de una transmisión automática de 8 velocidades que se engrana perfectamente con el sistema de AWD que puede mandar hasta el 80% de la fuerza a las ruedas traseras.
Su llegada a nuestro país no está confirmada, pero tampoco descartada, lo que nos deja una esperanza viva de que algún día circule en calles mexicanas y podamos tener un sedán más de clase mundial.