Como sabemos en los Emirato Árabes Unidos existe en general mucho dinero y exclusividad aunque no siempre buen gusto, hablando puntualmente de los coches ya que hemos visto preparaciones con diamantes, con pintura con oro y así pero en general son vehículos ya existentes que van a parar a esas latitudes.
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Pero ahora no tenemos una preparación especial sino un auto hecho en Dubái el cual podría ser la respuesta a la pregunta (que nadie ha hecho) de ¿qué pasaría si combináramos un Mercedes-Benz SLS con un KTM X-Bow?
Estéticamente vemos en la parte trasera las formas del modelo austriaco con una cintura delgada mientras que el frontal es del alemán aunque con muchos elementos aerodinámicos en el cofre y parte baja, los faros de LED cuentan con una forma caprichosa y mientras que el concepto general del auto es el de un speedster, es decir ninguna cúpula o pilar que cubra a los dos ocupantes, sólo un pequeño parabrisas.
La parte trasera es realmente interesante si es que ese trabajo de difusor, alerón y formas para dar mejor fluido al viento funcionan de hecho también podemos ver líneas muy cercanas a Lamborghini por los filos y ángulos por toda la carrocería.
Para la parte mecánica cabe destacar que la carrocería está hecha completamente en fibra de carbón, aunque no sabemos si el chasis es del mismo material con lo que el peso total es de 750 kg. El motor es un V8 de 400 hp y si bien ya no existen más datos técnicos este modelo conceptual llegará como preproducción en el 2015 y ese mismo año se podría realizar una edición de 25 unidades para su entrega inmediata.
El precio que se anuncia de momento es de 81.000 euros lo cual es relativamente bajo para el nivel de auto, así que ya sabes, si te gustó comienza a ahorrar y poder tener uno de esos primeros 25.
Cuenta cuentos profesional, con un especial gusto por la velocidad, y una calma innata por vivir mientras el mundo gira a prisa. De gustos extremos nacidos en el ciclismo y luego evolucionados al mundo motorizado. Aquel que puede pasar horas viajando en una carretera o un instante en las pistas de competencia, aunque viviendo, volando y dejando todo problema en el camino en mi motocicleta. De gustos particulares y enemigo de los autos aburridos que no transmitan sensaciones de manejo.