Lincoln MKZ, nuestra prueba de manejo

Un sedán grande que presume de una carga tecnológica por demás innovadora y que además el manejo, sensación y calidad son de los mejores dentro de este selecto segmento de los autos americanos Premium.

El Lincoln MKZ es un auto orgullosamente hecho en México por Ford, y el proceso de manufactura es tan bueno que su principal mercado el de Estados Unidos le ha otorgado diferentes reconocimientos en cuanto a calidad excelente, diseño e implementación tecnológica que sus muy selectos y exclusivos clientes lo saben y por eso lo adquieren.

Las líneas exteriores son sublimes, ya que los diseñadores tomaron la noción de «simplicidad elegante» como su punto de partida y llegaron a un sedán de lujo cuya integración de líneas y curvas es realmente

impresionante. El frontal es quizá junto con la parte trasera los elementos que lo hacen tan diferente y muy bien resuelto. Los grupos ópticos delanteros emiten una correcta iluminación ya que cuentan sistema direccional para una mejor visión. Incluso, éstos se conjugan con la parilla doble con cromo que luce seria y muy bien trazada, detalle que nos gustó.

En la zaga, las luces cruzan de un lado al otro además de que las letras del nombre resaltan para presumir una cintura alta y bien resuelta de la tapa de la cajuela. No dejamos de mencionar el enorme techo de cristal que se abre de forma completa y baja por encima del medallón trasero, otorgando un excelente clima de amplitud y libertad al momento de conducir. Por cierto, es el único auto dentro de su nicho que cuenta con este sistema.

Suntuoso y amplio, como debe de ser un vehículo de lujo. Cinco adultos viajarán de forma muy cómoda ya que el espacio para piernas y caderas es de los mejores en vehículos Premium. El sistema de entretenimiento como arte impecable es evidente en la atención a cada detalle. Tecnologías innovadoras como SYNC con MyLincoln Touch se integra perfectamente. El tablero de instrumentos se embellece con madera genuina. Iluminación ambiental proyecta un resplandor sutil a través de toda la cabina, creando un ambiente cálido y lujoso. La consola central es limpia y espaciosa en apariencia y funcionalidad. Los botones selectores de velocidad de la transmisión son ergonómicos y se encuentran en el panel de instrumentos central. Los elementos de diseño de este tipo mejoran el ambiente de Lincoln MKZ, haciéndolo abierto, amplio y acogedor. No hay queja de materiales y mucho menos de ruidos gracias al impecable aislamiento utilizado por Lincoln para tener un manejo muy confortable.

Nuestra prueba de manejo constó de 620 kilómetros y debemos de decir que el V6 de 3.7 litros del auto empuja sin chistar en cualquier circunstancia. Poderoso y ágil, además de que se entiende a la perfección con la transmisión automática de seis velocidades denominada SelectShift, que dicho sea de paso, no hay una palanca para cambiar las marchas ya que los ingenieros de Lincoln optaron por poner botones para la selección de las mismas. Algo diferente pero muy funcional. Los frenos son de disco en las cuatro ruedas con ABS y éstos funcionan correctamente, no muestran cansancio si se les exige y además la sensación del pedal es firme y correcta, detalle que nos sorprendió y que lo hizo muy bien en nuestro auto de pruebas.

Finalmente si lo que busca es un auto elegante, poderoso y con tecnología de última generación, sin duda el Lincoln MKZ 2014 es su auto. Nosotros sí lo recomendamos.

ESCRITO PORMario Rossi

Apasionado del mundo automotor, periodista por afición y amante de los vehículos que usan los elementos refinados del petróleo. Coeditor del suplemento semanal Autos Publimetro, en donde ponemos especial cuidado en todo aquello que se mueve gracias a un tren motor y ruedas. Entusiasta de los aviones, aprendiz de las redes sociales y fiel observador de la cartografía mundial, así como de las diferentes culturas del globo terráqueo.