Aston Martin comenzó a fundarse por el piloto Lionel Martin, vencedor en aquella carrera emblemática de montaña conocida como Aston-Clinton
Ha llegado el día de la entrevista con los directivos de la marca en nuestro país y, en el equipo estamos muy contentos de poder platicar de esta leyenda. Seguramente usted, estimado lector ha leído o ha escuchado hablar de Aston Martin, su relación con James Bond y su origen británico. ¿Pero de dónde viene? ¿Sabe?
Resulta que en 1913, Aston Martin comenzó a fundarse por el piloto Lionel Martin, vencedor en aquella carrera emblemática de montaña conocida como Aston-Clinton, es así que –no hay que romperse la cabeza– para saber que el nombre se sucedió entre el apellido de nuestro protagonista y el apellido primero de la competencia de motor del tipo Gran Turismo, por lo que al día de hoy, Aston Martin es especialista en este tipo de vehículos.
Debemos decir también que se generó un concepto de Aston Martin de cara a Spectre, la nueva entrega de James Bond, que tendrá a bien erizar nuestra piel al tiempo de acelerar nuestros sentidos de 0-100 o a mucha más velocidad.
Su desempeño era a prueba de todo, y bueno, su diseño no se puede dejar de mirar, tanto que sus rivales más competitivos serían armadoras de la talla del Cavallino y Maserati, italianas con acentos deportivos en todo su esplendor. Precisamente, el marcado diseño y estética robusta, pero elegante de las armadoras británicas, sería su máximo diferenciador.
Asimismo, la asociación y relación “amorosa” entre el vehículo y el agente 007 de la Inteligencia Británica, le ha posicionado como un objeto de deseo más allá de las prestaciones que pudiera ofrecer. Hoy por hoy ha sido solicitado por Daniel Craig para llevarlo y traerlo en los largometrajes Casino Royale y Quantum of Solace, así como próximamente en las siguientes entregas de la franquicia cinematográfica del cine de acción por excelencia.
Su pasado en las pistas y en las competencias siempre fue glorioso, aunque se dejó de practicar para enfocarse en la creación de productos para manejo sofisticado de calle. En 1959 ya desarrollaba vehículos capaces de alzarse con la categoría GT en las 24 Horas de Le Mans, mientras que el DBR9 marcó el regreso de Aston a la máxima competencia del Mundial de Resistencia.
Finalmente, la manufactura artesanal de cada uno de sus vehículos es tal, que entre 1957 y el año 2000, la producción total no había sobrepasado las 12 mil unidades. Sin embargo, a partir del 2003 la hechura de automóviles se incrementó y así también la demanda, para entregar números de hasta 7,250 unidades para el año 2007, cifras que continúan en asenso.
Debemos mencionar, ahora sí ya para finalizar, que Aston Martin provee de tres gamas de modelos al apasionado coleccionista automotriz: DB9, con motor V12 de 6 litros; Vantage, animado por un V8 de 420 caballos y 4.7 litros de desplazamiento, Vanquish de 2001 a 2007 y el Rapide, producido a partir del 2009.
Hemos seleccionado al DB10, modelo producido para la cinta Spectre como imagen principal, un bólido animado por el V8 y acoplado a una transmisión manual de 6 relaciones, ¿algo más?