La transmisión automática necesita de servicio cada determinado tiempo, y estas son sus fallas más comunes.
La falla de una transmisión automática se debe –generalmente– a dos cosas: el mal uso de la caja o la falta de mantenimiento. ¡Sí! No por ser “automática” quiere decir que no requiere de un buen cuidado cada determinado tiempo.
El mantenimiento de una transmisión automática se debe realizar cada 25,000 kilómetros o una vez al año; para el buen y prolongado funcionamiento de la misma.
Es verdad que es un poco más compleja que una transmisión manual, sin embargo, si le das el mantenimiento preventivo adecuado y la tratas sin rudezas, definitivamente alargarás su vida.
Una transmisión automática trabaja transfiriendo la fuerza del motor a las llantas mediante la presión de aceite generada por la misma. Pues este aceite, también funciona como lubricante de las partes mecánicas y enfría a su vez la caja de velocidades.
Te puede interesar: 5 malos hábitos que debes evitar con tu transmisión automática
Todo este proceso, con el tiempo y el uso el aceite se contamina y deteriora, por esto es importante realizarle un servicio de mantenimiento adecuado.
La lubricación interna y la calibración correcta de los cambios le darán un funcionamiento óptimo. Obtendrás una caja de velocidades precisa, sin jalones y con cambios suaves.
Si además de no darle un buen servicio, a la hora de manejar tu auto tratas mal a la caja (hacer los cambios bruscamente y sin respetar tiepos y espacios)… ¡imagínate!
Forzar a trabajar en malas condiciones a la transmisión puede causarle daños irreparables.
Aceite pesado, quemado, insuficiente, con filtro sucio y por largo tiempo, provocará que sus partes internas se quemen, se rompan, o en el mejor de los casos, se desgasten.
Ten en cuenta que reparar una transmisión (automática o manual) es muy costoso, mejor elude todo esto con servicios de mantenimiento.
No olvides visitar nuestro canal de YouTube