FIAT 500 1957 San Remo, el clásico de hoy

Un vehículo que cuenta con una historia legendaria, prácticamente a la par del Volkswagen 1, mejor conocido como «vochito» o sedán (nunca lo fue). El 500 de Fiat, revivido en 2007 y próximo a cambiar de generación, debe su nombre a un proyecto de automóvil encargado por Benito Mussolini, previo a la Segunda Guerra Mundial (1930). El polémico dictador y –entonces– Primer Ministro del Reino de Italia, al igual que Adolf Hitler, habría mandado un «brief» al senador Giovanni Agnelli para desarrollar un automotor de precio accesible que movilizara a los italianos, éste a su vez decidió «echarle la pelota» a Fiat, y la compañía tomó dos direcciones: desarrollar un vehículo de cero, a cargo de Oreste Lardone, mientras que Dante Giacosa se sumaba a una opción más lógica, desarrollar un auto a partir de lo ya probado en la compañía. Así pues en 1936 se lanza el conocido Fiat 500 Topolino, que debía su nombre a los 500 cc que debía medir su motor; el vehículo se vendió con mediano éxito y continuó en la producción hasta finales de la Segunda Guerra Mundial.

Luego de la derrota tras el conflicto internacional, la nueva Italia Republicana debía disponer de un automotor avanzado en tecnología, pero los pocos recursos impedían que se desarrollaran innovaciones capaces de competir con algunas otras armadoras «aliadas». Así pues, el proyecto de Vittorio Valetta, máximo dirigente de Fiat en la postguerra sería encargado nuevamente a Dante Giacosa, quien gracias a su habilidad pragmática cumpliría con la misión, sumando en 1952 a un talentoso ingeniero alemán de nombre Hans Meter Bauhof, quien arribaría con un proyecto atractivo en carrocería de dos plazas y motor trasero, no obstante, Giacosa elimina la propulsión trasera y le modifica para incluir el antiguo motor del Topolino, nace Fiat 600, que gana tiempo para enfocarse en un nuevo motor de cuatro tiempos a gasolina con refrigeración por aire y 13 caballos de potencia, cuyas dimensiones llegan a 479 cc y sería el bloque que daría vida al Nuova 500, célebre de 1957.

Tras la breve historia, Fiat revivió al auto en 2007, originalmente presentado en el Auto Show de Ginebra 2004, aumentó sus capacidades interiores y le entregó un motor 1.4 litros de 101 caballos de potencia para incluirse en el segmento «A». Así llegamos a nuestros tiempos, y a definir la edición 1957 San Remo que se basa en el modelo cabrio del 500.

Sus características son las de un automóvil de capricho, inspirado en las costas del noroeste italiano (San Remo), está llamado a convertirse en clásico tras algunas décadas de existencia en su garaje; un vehículo que se disfruta a velocidades medidas y se debe considerar como una gran solución urbana con carácter juvenil, o para aquel coleccionista que admira sus líneas y vive en él la historia que acabamos de relatar. Se ofrece en dos colores, verde chiaro y azul celeste, mientras que la capota de tela se manipula desde el interior de manera tan sencilla como la de un quemacocos, un claro punto a favor de quien siempre ha deseado un convertible.

Sin ser dinámico, su 1.4 multiair ofrece 101 caballos y 98 libras pie al acelerador, las cuales guardan el equilibrio para el cual fue diseñado este bello Cinquecento gracias a una caja automática de seis relaciones con modo sport y semi-manual. Sus sistemas de frenos ABS, distribución electrónica de frenado, control de estabilidad y tracción, harán que sus trayectos sean sumamente seguros, mientras que en caso de colisión la estructura del coche está fabricada en acero de alta resistencia con zonas de deformación al impacto, las cuales eliminarán la energía excesiva liberada al conductor en caso de accidente. También sus 7 bolsas de aire (frontales, laterales, tipo cortina y rodilla), evitarán lesiones si ocurre un episodio no deseado.

Los acabados en color marfil para el tablero contrastan con la piel bitono al interior del vehículo, mientras que el panel de instrumentos es sencillo de leer una vez que se acostumbra a manipularlo. El vehículo está equipado con un sistema de sonido Beats®, el cual se agradece en este tipo de automóviles, mientras que su aire acondicionado funciona a la perfección y al tacto, la consola es agradable.

Precio y competencia: Fiat 500 San Remo 1957 se ofrece en precio único de 330,900 pesos, pero apúrese, porque viene en serie limitada a México (65 unidades). Si este auto le enamora, seguramente podrá decidir entre: Mini, Smart, Ibiza I-Tech, Volkswagen Beetle y Audi A1, un segmento que no se define tanto por precio ni prestaciones, sino por la vista, el corazón y los sentidos.

Verde: siete bolsas de aire y todos los sistemas de seguridad, un vehículo tan llamativo como nostálgico y atractivo en cuanto a diseño, si desea un convertible para ir de la oficina a la casa, o vive en playa, 500 San Remo le llenará de grandes recuerdos.

Amarillo: el sonido del motor ingresa a la cabina con facilidad, mientras que la dirección se siente un tanto nerviosa, y podrá sufrir un poco en las correcciones. En ciudades como el D.F. (2,250 m sobre el nivel del mar), el vehículo –naturalmente– pierde potencia, no obstante si se le da el tiempo adecuado, disfrutará de su manejo.

Rojo: es un vehículo personal, no lo adquiera si busca ingresar a esposa, hijos y carreola.

ESCRITO PORMarco Alegría

Entusiasta de la comunicación y la actividad del periodismo ejercidos con profesionalismo. Manejo desde los 13 años, pero –en la actualidad– sigo jugando a los carritos.