¿En qué me fijo cuando voy a comprar un auto?

La compra de un auto puede ser un "gasto", la misión es cambiar la percepción por la palabra: "inversión", por medio de la palabra clave "información".

/junio 25, 2015

El equipo, o como cariñosamente le llamamos «El Team» de MemoLira.Com, a través de la dirección de Guillermo Lira, promueve la compra de vehículos nuevos, sí, pues un renovado parque vehicular es más seguro, más limpio, da menos problemas y, es como todo, por mucho que cuide sus zapatos tendrán una vida útil, por lo que lo mejor para todos es renovar.

Si bien la compra de un automotor puede ser considerada como un «gasto», es nuestra misión cambiar dicha percepción por la palabra: «inversión», y la herramienta clave para modificar este significado es la información.

Chevrolet Aveo

Estar informado incide directamente en nuestra toma de decisiones, o dígame usted si no toma decisiones diariamente como «corazonadas», las cuales en ocasiones pueden ser muy positivas, pero en algunos casos, no.

Así pues, investigar para usted se convierte en nuestro «pan de cada día», y por ello daremos algunos consejos para que usted, estimado lector, invierta en un vehículo, y no gaste en un coche que le traerá dolores de cabeza.

Precio: se vale soñar, pero ponga los pies en la Tierra y con ese presupuesto, «que le alcance y le alcance bien», citando a Memo Lira, podrá arrancarse a hacer una lista de posibles automóviles a probar. Una vez que elija este vehículo, revise a la competencia, en qué rango de precios está, y ponga atención en los planes: financiamiento, de contado, arrendamiento, etc. Saque la calculadora y revise las tazas de interés si es que se anima por un financiamiento.

Mercedes-AMG GT (C 190) 2014

Año modelo generación: en ocasiones nos damos de topes por comprar un vehículo próximo a cambiar, y es por ello que debemos investigar la vida de la última generación del auto que deseamos comprar. Los cambios generacionales traen –generalmente– mejoras sustanciales, la última tecnología disponible y, en ocasiones, hasta un mejor precio. En este año se han anunciado cambios de generación en: Acura RDX; Audi A1, A4, A5, Q7; BMW Serie 7, Chevrolet Camaro, Cruze, Malibu, Spark; Fiat 500, Honda Civic, Mazda CX-9; Mercedes-Benz GLK (GLE); Nissan Maxima, Titan, Suzuki Swift, Toyota Yaris Sedán (Yaris R); Volkswagen Tiguan, Touareg, Clásico (desaparece) y Volvo XC90. Por lo que dichos vehículos están llegando al límite de su vida generacional, y la siguiente vendrá con prestaciones que podrían ser de utilidad. Algunas modifican realmente poco, continúan con la plataforma anterior, incluyen diferentes opciones en el tren motor, etc, pero otras son modificaciones radicales, como el Nissan Maxima, que inclusive estará por debajo del precio del año modelo 2014.

Es importante porque puede esperar la decisión de compra, o puede negociar directamente con el «dealer» para obtener un mejor precio o equipamiento adicional, seguro gratis por un periodo de tiempo, etc.

Seguridad: es aquí cuando sugerimos no negociar con la cartera. Pagar por seguridad como: ABS, bolsas de aires o controles electrónicos no es un gasto, es una inversión que, esperemos nunca tenga que agradecer. Usted no podría en riesgo la vida de sus hijos, por lo que dentro de su presupuesto privilegie equipos de seguridad activa y pasiva por encima de un mejor audio o asientos forrados en piel.

Motorización, versión, equipo: el precio es un indicativo de algo, y bien se puede parecer que se compra el mismo vehículo, deberá fijarse en el bloque, la potencia, la transmisión, el equipamiento de seguridad,la conectividad, para evitar comprar un coche al que «le sobra potencia o le falta» de acuerdo a sus hábitos de manejo.

Servicio postventa y planeación de compra: ya que definió un presupuesto, sabe por ¿cuánto tiempo le gustaría tener este vehículo? Dos años sería ideal, pero los autos se devalúan, y habría que pagar de contado castigando su cartera en la transacción de compra-venta. Si no puede «darse el lujo» de realizar este tipo de renovación, 5 años es un buen periodo de tiempo, mismo que podría coincidir con el plazo de financiamiento, darle un año de colchón para ahorrar un poco de dinero de cara a su siguiente enganche y efectuar el cambio generacional del vehículo que compró y podría optar por renovar si es que el vehículo que maneja le ha resultado «bueno» en términos generales. Asimismo, revise cuánto está pagando en servicios, y si la agencia en donde lo compró está comprometida con usted, o con sus intereses propios. Hay que destacar que, por ejemplo, Toyota México es responsable de la calidad del vehículo en condición de nuevo, pero el servicio deberá entregárselo el distribuidor, que goza de una concesión por parte de la armadora para vender y realizar las labores de mantenimiento a los vehículos. ¿Qué quiere decir? Imagínese que compra un automóvil en la distribuidora de Interlomas, resulta que falla el sistema de frenos y usted desea reportar ese problema. No lo hará a Toyota México, pero si lo hace, ellos le solicitarán que haga contacto con el sitio que le vendió el automotor, en caso de no haber ningún tipo de llamado a revisión en el año modelo correspondiente. Así pues, usted entablará el diálogo con su vendedor, que le solicitará que hable con un asesor de servicio para revisar la mecánica del auto, y es ahí en donde podemos medir la satisfacción del cliente, no en el momento de compra. Como dice el refrán: «Conocerás bien a la gente en los momentos difíciles», o algo así… Por favor revise lo que se habla de determinado distribuidor, pues esa fama podrá beneficiarle o perjudicarle de la misma manera.

Finalmente le deseamos que investigue todo lo referente al automóvil que está por adquirir, y que disfrute de su decisión, pues únicamente usted deberá determinar el vehículo que habrá de manejar, y pagar…

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Marco Alegría
Entusiasta de la comunicación y la actividad del periodismo ejercidos con profesionalismo. Manejo desde los 13 años, pero –en la actualidad– sigo jugando a los carritos.
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Entusiasta de la comunicación y la actividad del periodismo ejercidos con profesionalismo. Manejo desde los 13 años, pero –en la actualidad– sigo jugando a los carritos.


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