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Ferdinand Karl Piëch, un ingeniero austriaco que forma parte de la más alta categoría de ejecutivos y pilares de lo que hoy en día es Grupo Volkswagen.
Arrancamos esta sección, Biografías, a fin de desentrañar la historia de los personajes más importantes de la industria, pues la verdad de las cosas, las marcas están hechas por hombres y nombres, tales como el de Ferdinand Karl Piëch, un ingeniero austriaco que forma parte de la más alta categoría de ejecutivos y pilares de lo que hoy en día es Grupo Volkswagen.
Su nombre es tan reconocido como el de su abuelo, Ferdinand Porsche, y él es el tercer hijo del matrimonio entre Louise Porsche (hermana de Ferry Porsche) y Anton Piëch, un abogado vienés que formó parte de la planta de Volkswagen en Wolfsburgo.
El nacido el 17 de abril de 1937, cuenta entre sus hermanos a Ernst Piëch, yerno del primer Director General de Volkswagen, su hermana Louise Daxter-Piëch, fue directiva de la empresa VW/Porsche conocida hoy como Porsche Holding, y su hermano menor, Hans-Michel siguió el camino de la abogacía en Austria.
Habilidades: además de sus decisiones directivas, Ferdinand es un habilidoso ingeniero cuyos estudios están avalados por la Escuela Politécnica Federal de Zúrich, cerca de St. Moritz, y su proyecto de fin de carrera se basó en el desarrollo de un motor de F1.
Como era de esperarse, en 1963 se suma a Porsche KG, un año tan virtuoso que marcó el inicio de la leyenda 911, producto de la sapiencia de su tío Ferry Porsche, Ferdinand escala hasta convertirse en gerente de I+D. Sin embargo, a principios de 1972, se llegaría a un acuerdo para que ningún Porsche-Piëch formara parte de la junta directiva de Porsche A.G., por lo que funda su compañía y desarrolla trabajos para Daimler-Benz antes de laborar para AUDI NSU Auto Union AG, en donde su colaboración le ganó a la marca el desarrollo de quattro enfocada en el WRC, con el cual arrasaron en los campeonatos de la época, además incorporó el motor TDI de inyección directa y utilizó carrocerías de aluminio.
En 1993, sucede a Carl Hahn como consejero delegado y ocupa el cargo de máximo dirigente de la marca Volkswagen, que venía de momentos tan difíciles como el borde de la bancarrota. Su primera medida fue contratar a José Ignacio López de Arriortúa, ex General Motors, quien presentó una demanda por espionaje. El ejecutivo vizcaíno, sería conocido como el estrangulador de Wolfsburgo gracias a su impecable manera de negociar y estricto sentido de trabajo, y la máxima medida de optimización de recursos fue la reutilización de plataformas para diversos vehículos.
Piëch es Presidente del Consejo de Vigilancia de Grupo Volkswagen y de MAN SE, además de un importante accionista del Porsche Automobil Holding SE. Sus mayores aportes fueron sacar a Grupo VW de la bancarrota, revivir a AUDI con nuevas tecnologías y aterrizar productos tan positivos para la incursión de la alemana en los mercados norteamericanos gracias a su New Beetle. Bajo su cargo se han producido el Bugatti Veyron, Audi R8, Volkswagen Phaeton y el Lamborghini Gallardo, entre otros. Algunos de los cuales han sido cuestionados por el poco retorno de inversión que tienen de acuerdo al elevado costo de producción.
Finalmente, Ferdinand tiene 12 hijos producto de cuatro esposas, y de acuerdo a sus biógrafos, es un ejecutivo de pocas palabras, frío y tajante en la toma de decisiones, se le atribuyen los ceses de Bernd Pischetsrieder y Wendelin Wiedeking.
