El conducir en lluvia, aumenta el número de accidentes significativamente, por el hecho de que el pavimento se vuelve resbaladizo, hay escasa visibilidad y se llega a perder el dominio sobre el vehículo.
1. Manejar a exceso de velocidad
El hecho de que manejes más rápido cuando llueve, no va hacer que tu coche no se moje o que llegues más rápido a tu lugar de destino. Cuando llueve o comienza a llover debes de respetar el límite de velocidad y de lo contrario reducir la misma, ya que cuando llueve, el 24% de los accidentes son motivados porque la velocidad es inadecuada. El 83% de los accidentes por velocidad se debe a que el conductor no adapta su conducción a las circunstancias que le rodean (lluvia, niebla, terrenos difíciles, alto tráfico etc.).
¡Nunca de los nunca debes de frenar en un charco! Algunas personas creen que al hacerlo se evitará que el coche se moje o que éste pase más rápido. Pero es todo lo contrario, ya que es muy peligroso frenar y más cuando se viene a exceso de velocidad. Cuando el coche pasa por un charco, los canales en el dibujo de la llanta no son capaces de evacuar la suficiente cantidad de agua, por lo que la llanta no va a tener el suficiente agarre y al frenar vamos a tener una pérdida de control que será inevitable derrapar.
Siempre es más recomendable circular por los carriles centrales, ya que en los laterales por lo general se reúnen más cantidades de agua formándose algunos charcos.
4. No encender las luces de tu vehículo
Cuando llueve la visibilidad que se tiene cuando vas dentro de tu coche se reduce, por lo que siempre se deben de encender las luces y cuando es aún más fuerte la lluvia y de plano no alcanzas a ver lo que hay delante de ti, siempre enciende tus intermitentes, ya que de esta manera estas logrando que los otros conductores tomen sus precauciones y logren tener una vista de tu vehículo.
Con el hecho de no tener una buena visión en el parabrisas, puedes provocar un accidente. Ya que la gran cantidad de agua y el hecho de que se te empañen los vidrios, puede dejar casi nula tu visibilidad. No te esperes a que llueva para checar tus parabrisas, estos deben de ser capaces de quitar el agua con rapidez. En el caso de que no sean capaces lo más recomendable es estacionarse y dejar a que pase un poco la lluvia para continuar con tu camino.
6. Ingresar por vialidades que ya están inundadas o donde se incrementa mucho el nivel del agua
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