La compañía fundada a finales de los años 70 por Klaus Brackmann y Bodo Buschmann, ha modificado al Mercedes-Benz AMG S-63 Cabriolet para exprimir su poderoso 5.5 V8 Twin-Turbo de 577 hp, hasta… ¡¡¡838 caballos de potencia!!!
Cómo lo logra, bueno, pues ha modificado el bloque 5.5 litros a 6.0, cuenta con nuevo cigüeñal, pistones, bielas, culatas forjados, módulo de admisión nuevo, sistema de escape diferente y nuevos turbos.
En el primer caso, el AMG detiene el crono en 3.8 segundos de 0-60 millas por hora, pero este bólido puede lograr 62 millas en tan solo 3.5 segundos. ¿No es mucho verdad? Dice Brabus que puede –obviamente– ir más rápido, no obstante los neumáticos no soportarían tanta torsión.
Finalmente, la gran diferencia reside en la velocidad punta, ya que el ejemplar salido de agencia está gobernado electrónicamente a 155 millas por hora (249 km), mientras Brabus alcanzará 217 millas por hora, es decir ¡350 km/h! Ésta se logra gracias a un paquete aerodinámico cargado de fibra de carbón, mientras que los rines de 18″ pasaron a 22, y el interior también ha sido rediseñado. «¿De a cómo?» 180 mil morlacos de los verdes.
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